RedacciónMadonna llegó a los Grammy luciendo como en el videoclip de «Living for love»: de sexy torera, con montera y muchos encajes, corsés apretados y guantes largos tal y como nos tiene acostumbrados desde hace 30 años. La artista de 56 años, obviamente, se robó todas las miradas y actuó muy coqueta y fresca, al punto que no tuvo ningún reparo que levantarse la falda de su modelo de Givenchy y dejar al descubierto parte de su trasero y su ropa interior. ¡La reina del pop se resiste a dejar de qué hablar!
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