Medina y Abinader detienen colapso sistema de partidos

El politólogo y consultor político Belarminio Ramírez Morillo expresó este miércoles que los legisladores seguidores del expresidente Leonel Fernández atraviesan por una situación difícil, puesto que se encuentran en el dilema de ser leal a su líder,  cuidar la unidad de su partido y preservar sus carreras políticas.

El escritor y catedrático universitario manifestó que la única forma que tienen esos legisladores de  cuidar y preservar a Leonel Fernández, es siendo respetuosos de las instrucciones trazadas por el Comité Político, organismo máximo de esa entidad política.

El politólogo catalogó la reacción del expresidente  en su discurso que dirigió a la nación como un desahogo emocional y sentimental producto de las embestidas de que ha sido objeto su liderazgo y su persona.

“Un liderazgo sustentado en el conocimiento que durante dos décadas fue el centro cohesionador de la sociedad, con un legado trascendente en la economía, la política, el desarrollo social y la cultura democrática, de repente no puede echarlo todo por el suelo, dándose un autogolpe de Estado en su partido y colocándose de espalda al deseo de las mayorías”, reflexionó Belarminio Ramírez.

Puntualizó Ramírez Morillo que la lealtad a Leonel debe manifestarse preservando al PLD unido y contribuyendo a que la organización se mantenga en el poder más allá del 2016, ya que actuar en otra dirección es un desatino, y de cometerlo, pronto se arrepentirán.

Instó al expresidente Leonel Fernández y los legisladores que les siguen a que se desapasionen y se conviertan en garantes de la unidad del PLD, puesto que dividir a su partido y colocarse de espaldas a ese 67% de la ciudadanía, equivale a un suicidio político.

El experto manifestó que la lectura a los resultados del sondeo de la  Peen Schoen y Berland es un indicador obvio de que Danilo Medina y Luís Abinader son en el momento los dos liderazgos que sirven de muro de contención al resquebrajamiento de los partidos políticos.

Señaló que el escenario está pintado para que en el 2016 Danilo Medina sea el candidato del oficialismo y Luís Abinader el de la oposición. Empero, si los intereses de grupos en los partidos no entienden que la democracia del momento exige postular a las candidaturas que las mayorías demandan, entonces estarían colocándose una navaja en su propia garganta.

El consultor político concluyó que la crisis del PLD si llega a un desenlace final donde la organización se divida y sea necesario expulsar a los legisladores en rebeldía, el acontecimiento se traducirá tanto en una crisis de la partidocracia como de la democracia, con graves consecuencias para la sociedad dominicana.

Redacción

Agregar comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.