Alicia Vikander, la nueva heroína

En tan sólo cuatro años pasó de actriz desconocida a ganadora del Oscar, gracias a un inglés impecable, una belleza contundente, un talento que le brota por los poros y la decisión de tomar el toro por las astas cada vez que se enfrenta a un desafío.

A sus 28 años, Alicia Vikander aprovecha al máximo el buen momento que está viviendo, lo que se traduce en cuatro estrenos previstos para lo que falta del año y el intenso rodaje del remake de Tomb Raider, el filme que promete ponerle en la misma senda de heroína del cine de acción por el que han transitado antes Jennifer Lawrence, Milla Jovovich, Uma Thurman, Scarlett Johansson, Michelle Rodríguez, Carrie-Ann Moss, Sigourney Weaver, Shailene Woodley, Kate Beckinsale o Angelina Jolie.

Desde su llegada a Hollywood, Vikander ha aprovechado cada oportunidad que tuvo para participar en superproducciones, aunque no siempre le ha salido bien. Se apuntó en la mediocre El quinto poder, junto a Daniel Bruhl, fue una agente secreta en Operación U.N.C.L.E, que tampoco tuvo los resultados esperados. Y también supo lo que es un gran fracaso con El séptimo hijo, que nunca recuperó los 95 millones de dólares que costó.

La actriz confesó ser fan de las dos películas que protagonizó Angelina Jolie en el 2001 y el 2003, y por eso no ha querido perder la oportunidad de seguir sus pasos

Pero el inesperado éxito de Ex-Machina, en donde encarnó a una cyborg que enamoró a la audiencia y el de La chica danesa, el filme que le dio la estatuilla dorada, le ayudaron a encontrar el camino hacia la cima, que incluyó el papel de la enemiga de Jason Bourne en el filme que marcó el retorno de Matt Damon a su personaje más popular y que recaudó en todo el mundo más de 400 millones de dólares. Sin embargo, allí Alicia rodó la mayoría de sus escenas detrás de un escritorio, y aunque bromeó en la presentación de esa película diciendo que había ejercitado mucho sus dedos, anunció que estaba muy entusiasmada con su siguiente papel.

Quien ya se ha convertido en una de las estrellas más buscadas de la industria y se ha lanzado a producir sus propias películas, confesó que jugaba al popular videojuego Tomb Raider cuando tenía 12 o 13 años, atraída por la idea de que la protagonista fuera una mujer, Lara Croft, “aunque como me asustaba un poco tenía que tomarme un descanso cada 20 minutos”, admitió en aquella ocasión.

La protagonista tiene 21 años, es hija de un excéntrico multimillonario que ha desaparecido desde hace más de un lustro, y siempre se ha negado a reemplazarle al frente de su empresa, optando por ganarse la vida como mensajera en bicicleta mientras estudia en la Universidad en Londres. Hasta que, en determinado momento, se lanza a investigar lo que ha ocurrido con su progenitor, lo que le lleva hasta una remota isla frente a las costas de Japón, un sitio en el que tendrá que usar todos sus recursos para sobrevivir.

Roar Uthag, el director, también es escandinavo, aunque de Noruega, y viene de realizar la exitosa La ola y el hombre que acompaña a Lara en su aventura es Daniel Wu, una estrella del cine chino que nació en California y que también parece decidido a ganarse el respeto de Hollywood.

Por ahora, Vikander no se queja de su intenso ritmo de trabajo y dice que se mantiene en contacto con sus familiares y amigos vía Facetime, aunque se ha negado a explicar cómo hace para mantener su relación con su pareja Michael Fassbender, quien tiene un ritmo de trabajo tan intenso como el suyo.

Tras señalar que no habla de esos temas, aclaró: “Yo siempre encuentro el tiempo para la gente que es importante en mi vida”, mencionando a sus cuatro hermanos. También reveló que desde su adolescencia se imagina como madre, aunque es obvio que por ahora esos sueños tendrán que esperar.