RedacciónMéxico recurre a la ayuda de expertos internacionales para dilucidar las circunstancias en las que se produjo el accidente de helicóptero que acabó este lunes con la vida de la gobernadora de Puebla, Martha Érika Alonso, y de su marido y también exgobernador poblano y coordinador de senadores del Partido Acción Nacional (PAN, derecha), Rafael Moreno Valle.
El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha solicitado la colaboración de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (la National Transportation Safety Board) de Estados Unidos, que proporcionará investigadores de alto nivel para tratar de arrojar luz en torno a lo sucedido.
También con los fabricantes del fuselaje y las turbinas del helicóptero, producidos, respectivamente, en Italia y en Canadá, que ya han enviado peritos al lugar de la tragedia, en la que, además de Alonso y Moreno Valle, murieron los pilotos de la aeronave y un asistente del segundo en el Senado, Héctor Baltazar.
«Tenemos instrucciones precisas del presidente de la República de contar con los mejores expertos internacionales y, por ello, ya se ha contactado con la National Transportation Safety Board estadounidense. Se trata de hacer efectivo el compromiso con la verdad», subrayó el subsecretario de Transportes de México, Carlos Alfonso Morán, en una rueda de prensa convocada poco después del mediodía de este martes.
«No se puede descartar ninguna causa, tiene que ser investigado», agregó el número dos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Horas antes, el titular de esa dependencia, Javier Jiménez Espriú, había llamado a no especular de ninguna manera con que se trate de otra cosa de lo que aparentemente es hoy: «una falla en el aparato».
«El tiempo de la investigación es incierto en estos momentos. Hay una importante destrucción de la aeronave, pero esperamos que los expertos puedan trabajar lo antes posible»,dijo Jiménez Espriú.
