En una pelea muy cerrada, Artur Beterbiev se llevó una decisión mayoritaria sobre Dmitry Bivol para convertirse en nuevo campeón mundial indiscutido en los semipesados el sábado en Riad, Arabia Saudita.
Fue el clásico choque de estilos que todo mundo esperaba, con Dmitry Bivol boxeando, moviéndose, disparando jabs, contra un Artur Beterbiev que nunca se rindió en su presión, y aprovechó la segunda mitad de la pelea cuando Bivol perdió piernas para poder ganar los rounds que necesitaba para terminar con una ligera ventaja en las tarjetas.
Uno de los jueces vio empate 114-114, mientras que los otros dos vieron ganar a Artur Beterbiev 115-113 y 116-112. La tarjeta no oficial de IZQUIERDAZO vio ganar a Artur Beterbiev 115-113.
El cierre de pelea de Artur Beterbiev fue decisivo en su victoria, ganando los últimos tres rounds en la tarjeta no oficial de IZQUIERDAZO.
Fue una gran pelea en el sentido táctico y estratégico, aunque no en lo dramático o emotivo. Uno, Bivol, apostándole a la dinámica y el contragolpeo, y el otro, Beterbiev, persiguiendo, persistiendo y siendo paciente en su presión.
Bivol había dicho en la previa que tenía que hacerle la pelea perfecta a Beterbiev para ganarse, y aunque por momento, rozó esa perfección con su boxeo, en los rounds finales Bivol no pudo mantener el ritmo. En el último tercio de la pelea, Bivol peleó más amarrado en sus manos, con algunos lapsos cortos de agresividad que lo hicieron perder rounds.
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