RedacciónUruguay jugará con Francia en los cuartos de final del Mundial de Rusia, después de una actuación estelar de Edinson Cavani.
El delantero charrúa, con un doblete, demostró que la pólvora de los de Tabárez estaba mucho más preparada que la de los de Fernando Santos. Cristiano Ronaldo, el mismo día que Leo Messi, dice adiós a su participación en el Mundial.
Uruguay tardó 7 minutos en adelantarse, merced a un imperial Edinson Cavani. El delantero del PSG creó la jugada del primer gol del encuentro desde la mitad del campo, cuando vio a Luis Suárez en la otra banda y emprendió una carrera hasta el pico del área pequeña para que el del Barcelona le devolviera la bola a la cabeza. Imparable gol, ante una Portugal que empezó a apretar, aunque sin suerte arriba.
Los de Tábarez empezaron a contemporizar y dejar el balón a Portugal. En una de esas contras, Luis Suárez lo intentó (después de fingir un par de golpes que no recibió, para no perder costumbre) de falta, pero Rui Patricio estuvo rápido al sacar una mano que impidió el 1-1. Cristiano no tuvo su tino.
Volvió a ser el faro donde se miraron los portugueses, y pese a que sus conexiones con Guedes generaron cierta tensión en la defensa uruguaya, no llegó a poner en problemas a Muslera.
La segunda parte comenzó con Portugal apretando más. El conjunto de Fernando Santos adelantó líneas, y asfixió a una Uruguay que llevaba sin encajar un gol desde noviembre de 2017. Llegó a balón parado: en un córner, Pepe enganchó de cabeza un balón al que no llegó Cristiano para anotar el empate. El defensa del Besiktas cabeceó libre de marca, después de que Godín llegara tarde a cubrirle.
Poco le duró la alegría a Portugal. Cavani recibió un balón escorado y aunque Rui Patricio intentó adivinar el disparo, el charrúa mandó el balón con un sutil toque con la pierna derecha al fondo de las mallas. Poco más duró en el campo.
Justo después de que Bernardo Silva fallase a portería vacía, tras un fallo de Muslera al atrapar el balón, cundió el pánico entre los sudamericanos: Cavani se echó la mano a la pierna. Cojeando y con gestos de dolor, se apoyó en Cristiano Ronaldo para irse al fondo del campo y pedir el cambio.
Sin su referente en ataque, los uruguayos perdieron peligro… y lo ganaron los portugueses. Quaresma salió al campo para convertirse en el mariscal, mientras que Tabárez ordenó replegar filas. Portugal se vino arriba y el encuentro entró en unos últimos minutos frenéticos… falta no pitada incluida en el 93 que podría haber supuesto una ocasión de peligro clara.
El último córner, con Rui Patricio en el área, acabó en nada… y Uruguay se metió en cuartos de final.
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