RedacciónCon los Houston Rockets sumando 13 victorias al hilo y con ventaja de medio juego en la tabla de posiciones sobre los Golden State Warriors, ¿podríamos ver unas finales de la Conferencia del Oeste entre ambos equipos tan cerrada como su actual batalla por el primer sembrado en el occidente?
Debido al contraste entre sus linajes de campeonato y el récord de los Rockets en los playoffs en la era de James Harden lleno de altibajos, los Warriors siguen siendo grandes favoritos para alzarse con el título. Sin embargo, las probabilidades de Houston han mejorado, de 16-1 antes de vencer a Golden State en la noche inaugural (de acuerdo con el Westgate SuperBook Las Vegas) a 2-1 durante la jornada del lunes.
Entonces, ¿cuán realistas son las probabilidades que tienen los Rockets de superar a los Warriors? Revisemos el por qué podrían ser el oponente más difícil al cual se haya enfrentado Golden State bajo el mando de Steve Kerr.
¿Una ofensiva histórica para Houston?
Varios panelistas de la Conferencia de Análisis Deportivo MIT Sloan, celebrada el pasado fin de semana y co-organizada por el gerente general de los Rockets Daryl Morey, mencionaron que el rating ofensivo de Houston es el mejor en la historia de la NBA. Eso es cierto, pero hay que hacer un par de salvedades.
La primera, dependiendo de la forma en la cual se calculan las posesiones, es que la ofensiva de Houston quizás no sea la más eficiente de la NBA. De acuerdo con las versiones publicadas en ESPN.com y las páginas Web de NBA Advanced Stats, los Warriors (¿Y quién más?) disfrutan de ligera ventaja, de 114.1 y 113.3, respectivamente. Ambas cifras mejoran el rating de Golden State de la pasada temporada (113.2), la más alta producida desde que se comenzara a llevar registro estadístico de las pérdidas de balón en forma colectiva por primera vez, en 1973-74.
Utilizando la fórmula de Basketball-Reference.com para calcular posesiones, la cual difiere de las anteriores, los Rockets (115.8) se catapultan sobre los Warriors (115.6) y cualquier otro equipo en la historia de la NBA. Los Lakers de 1986-87, quienes se impusieron a los Boston Celtics en las Finales de la NBA, están en el segundo lugar en dicha categoría, con 115.6 puntos por cada 100 posesiones. CleaningTheGlass.com, el cual excluye tiempo muerto y utiliza conteos de posesiones verdaderos en vez de los estimados, tiene a ambos quintetos empatados, con 115.6 puntos por cada 100 posesiones.
El dilema más importante es que el rating ofensivo promedio de la liga es mucho más alto hoy en día que a principios de la década del 2000. Ajustar las cifras coloca a ambos clubes en compañía mucho menos impresionante, en lo que a promedios de liga se refiere. Los Rockets anotan 6.8 por ciento más de puntos por cada 100 posesiones que el típico equipo de la NBA bajo la definición utilizada por ESPN, lo cual los colocaría en el puesto 18 de todos los tiempos, desde la fusión de la NBA con la American Basketball Association (ABA), producida en 1976.
Sin embargo, existe la tesis que la ofensiva de Houston, a plena capacidad, es la mejor que hayamos visto. Los Rockets suman rating ofensivo de 115.9 en partidos en los cuales Harden y Chris Paul ha jugado juntos durante la presente temporada, un 9.3 por ciento mejor que el promedio de la Liga. Eso supera a los Dallas Mavericks de 2003-04 como mejor ofensiva relativa registrada. Si restamos cuatro partidos adicionales en los cuales Clint Capela ha estado fuera de acción y Harden y Paul en la cancha, Houston es 10.7 por ciento más eficiente que el equipo promedio de la NBA con los tres jugadores disponibles.
Mejoría defensiva por parte de los Rockets
La historia nos dicta que una ofensiva de élite, por sí sola, no basta para garantizar un campeonato. Ninguno de los ocho equipos con mejor rating ofensivo comparado con el promedio de la liga, registrados desde la fusión NBA-ABA, han sido capaces de alzar el título. Sólo los Warriors en 2015-16 han llegado a las Finales de la NBA. ¿El problema? Sólo dos de esos ocho clubes, Golden State y los Mavericks de 2002-04 (que perdieron en las finales de la Conferencia del Oeste con su estrella Dirk Nowitzki fuera de acción en los tres partidos finales debido a una lesión) se encuentran en el Top 10 en lo que respecta a rating defensivo.
Justamente allí es donde Houston espera terminar, con un equipo mostrando mayor equilibrio que sus predecesores comandados por Mike D’Antoni. Si bien los Phoenix Suns de D’Antoni fueron defensivamente mejores de lo que se les reconoce, gracias a su ritmo vertiginoso en el ataque, el puesto más alto en el cual ha quedado un equipo con D’Antoni como entrenador es el 13, propiedad de los Suns en 2006-07, con un promedio ligeramente superior al de la liga. Los Rockets de este año, actuales dueños del décimo lugar en esta estadística, deben superar lo alcanzado en Arizona.
Houston ha utilizado una técnica defensiva popularizada por los Warriors: hacer rotaciones ante pick-and-rolls, no como consecuencia de su debilidad; sino de forma proactiva para así desencajar a sus rivales de sus usuales ofensivas pick-and-roll. De acuerdo con el rastreo hecho por Second Spectrum, ambos equipos hacen rotaciones en pick-and-roll más frecuentemente que cualquier otro equipo en la NBA.
Aunque los Rockets ya estaban en el segundo puesto en la NBA en promedio de cambios durante la pasada temporada con un 21.3 por ciento durante la campaña regular, la suma de Luc Mbah a Moute y PJ Tucker al ataque los ha hecho mostrarse aún más cómodos en los cambios.
En un punto, estaba claro que hacer esos cambios defensivos era la mejor manera de contrarrestar la ofensiva de Golden State. En 2014-15 y 2015-176, los Warriors tenían menor promedio de puntos por cada oportunidad tras un cambio defensivo de sus oponentes. Eso ha cambiado desde la llegada de Kevin Durant. En lo que va de temporada, Golden State promedia 1.14 puntos por oportunidad contra cambios defensivos, comparado con los 1.07 puntos por oportunidad en todas las jugadas, incluyendo cortinas.
No obstante, los cambios han sido parte fundamental para que Houston se haya alzado en dos de tres enfrentamientos contra Golden State en la presente campaña. Los Warriors promediaron apenas 0.88 puntos por oportunidad en jugadas en las cuales los Rockets hicieron cambios, comparado con los 0.99 puntos por oportunidad en todas las otras jugadas con cortinas. El destino de una posible serie de playoffs dependerá mucho si Golden State es capaz de cambiar esa situación.
¿Los Rockets serían el mejor oponente contra los Warriors?
En los cuatro años desde que Golden State se convirtió en contendor por el campeonato, solo ha habido un equipo diferente a los Warriors en sumar un diferencial de puntos mejor que plus-8 puntos por partido: los San Antonio Spurs de 2015-16, que ganaron 67 partidos, pero fueron superados de forma sorpresiva por el Oklahoma City Thunder, habiendo quedado a un peldaño de enfrentar a Golden State en las finales de la Conferencia del Oeste. Como resultado, o Rockets (plus-8.8 puntos por partido) o los Toronto Raptors (plus-8.6) sería el mejor equipo al cual los Warriors se habrán enfrentado durante su carrera, de acuerdo con esta métrica.
Obviamente que evaluar con respecto a lo logrado en la temporada regular probablemente haga que subestimemos al Thunder de 2015-16, quien forzó a Golden State a jugar siete partidos antes de perder; además de los Cleveland Cavaliers de esa campaña que pudieron llegar a la meta en las Finales de la NBA. Si bien Harden es el favorito para llevarse el premio al Más Valioso, quizás no sea capaz de dominar en una serie de playoffs en la forma en la cual lo hizo LeBron James en las Finales. Pocos jugadores han sido capaces de algo similar.
Sin embargo, Houston ha hecho más que suficiente para captar la atención de los Warriors y el resto de la liga. Con Harden, Paul y Capela todos sanos, los Rockets tienen récord de 30-1 con diferencial de puntos de plus-13.8, y de 2-0 contra Golden State.
Si bien los Warriors probablemente seguirán disfrutando del favoritismo en un enfrentamiento de playoffs debido al potencial que tienen para brillar con su rotación y jugar más fuerte cuando es necesario, la brecha entre ellos y los Rockets ya no aparenta ser tan grande como esperábamos a principios de temporada. Gracias a su éxito a toda prueba, los Rockets han logrado ser considerados como serios contendores en los playoffs.
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