RedacciónLa Romana.- Los planes regionales de erradicación del VIH-Sida en el año 2020, necesariamente deben contar con el apoyo sostenido de los medios de comunicación y los comunicadores, en su triple rol de, hacedores de opinión pública, masificadores de mensajes y el más importante incidencia para cambio de comportamientos.
Así lo expresó el director ejecutivo del Consejo Nacional para el VIH y el Sida, Víctor Terrero, quien entiende que la Región del Caribe y en especial el país, no podrá alcanzar la meta de que el 90 por ciento de su población se realice una prueba voluntaria de VIH, que el 90 por ciento de las personas VIH positivas tengan tratamiento antirretroviral y que además el noventa por ciento de los VIH positivos tenga una carga viral indetectable, si no cuenta con el soporte de los periodistas y los medios de comunicación.
El funcionario detalla que esa estrategia conocida como 90-90-90 es el eje fundamental del Plan Estratégico Nacional 2015-2018; que aunque ambiciosa es alcanzable y conlleva incrementar las acciones de prevención, solicitar, si es preciso hasta el cansancio, la realización de pruebas y garantizar el acceso a los servicios clínicos y comunitarios.
Al hablar ante cerca de 60 comunicadores sociales de Barahona, provincia que acusa la más alta prevalencia de infección en población clave (gay, trans y hombres que tienen sexo con hombres) de 6.9 por ciento, el funcionario estimó que es indispensable la colaboración de los sectores citados.
Victor Terrero empero puntualiza que pese a los desafíos, la epidemia del VIH se ha mantenido estable en los últimos años en el país. Señala que la ENDESA del 2007 y 2013 revelan que la prevalencia del VIH en la población general se ha mantenido en un 0.8 por ciento.
Observó que las estimaciones de nuevos casos de VIH pasaron de 1,639 en el 2007 a 788 en el 2014, con una reducción mayor al 45 por ciento Asimismo el número estimado de defunciones relacionadas al SIDA disminuyó de 4,136 en 2007 a 1, 694 en 2013 (59%).
El director de CONAVIHSIDA opinó que sin embargo el estigma y discriminación contra la población de trans, gays y otros HSH es muy arraigado en el país, citando como ejemplo del rechazo de que son objeto esos dominicanos, la situación de Barahona en donde el 11.7 porciento declara haber sido rechazado en el ámbito laboral, el 3.7 por ciento en los servicios de salud, el 7.6 por ciento por su familia y el 14.3 por ciento en la escuela o universidad.
Estima que esa realidad obliga al CONAVIHSIDA a contemplar en su Plan Estratégico 2015-2018 el componente de Derechos Humanos.
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