Periodismo ético

POR ALBERTO QUEZADA

Desde el Gobierno dominicano, a través de la Dirección General de Comunicación (DICOM), ha surgido la fantástica idea de llevar a cabo la realización de una actividad docente denominada ¨Diplomado de Periodismo Ético¨. Muy bien!

Tanto interés e importancia se le ha puesto a la citada actividad que su lanzamiento y presentación contó con la presencia de nada más y nada menos que del Excelentísimo Señor Presidente,  licenciado  Luis Abinader Corona. Magnifico!.

Para comenzar, quiero dejar claro  que no me opongo a ninguna actividad que vaya en beneficio de la formación y actualización del profesional del periodismo o de cualquier otra área profesional, al contrario; la celebro.

Ahora bien, con lo que no estoy de acuerdo es que en una actividad de ese calibre sus organizadores en coordinación con el Colegio de Periodistas Dominicano (CDP), hayan incurrido en un error capital.

Por ejemplo, los auspiciadores debieron tener el cuidado de no mesclar mansos con cimarrones  y permitir que dentro de los matriculados para ese diplomado se incluyeran comunicadores usurpadores  consuetudinarios de la profesión de periodista.

Eso no es sano, es una negación al esfuerzo y la intención que quizás tuvieron en algún momento los responsables de articular el diplomado con la finalidad  de  fortalecer  el  ejercicio periodístico ético en la República Dominicana.

Los reportes  que se tienen dan cuenta de que ahí hay más comunicadores usurpadores, que periodistas graduados en ejercicio, y eso es una falta de respeto al tema a tratar y al propio Presidente Luis Abinader.

Es una pena que desde una área  del Gobierno y el propio CDP sé esté estimulando, consciente o inconsciente, este tipo de acciones cuando lo que  quizás se quiere en el fondo con la señalada actividad  es la robustez  ética y profesional de los hombres y mujeres de la prensa.

En un ¨Diplomado de Periodismo Êtico¨ los usurpadores no deben estar, ahí deben estar presente   única y exclusivamente  los periodistas egresados de una universidad. Más nada.  

El autor es periodista y magíster en derecho y relaciones internacionales. Reside en Santo Domingo. Quezada.alberto218@gmail.com