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Alimentos dañinos
La alimentación influye de manera determinante en la salud de las personas. Desde hace años sabemos que las frutas y las verduras, por ejemplo, son alimentos insustituibles en nuestra dieta y contribuyen a la prevención de enfermedades cardiovasculares y algunos cánceres, según avisa la OMS. De la misma forma, la ciencia ha demostrado que una mala alimentación también puede acabar afectando a nuestro colesterol, a la presión arterial y, en definitiva a nuestro sistema cardiovascular.
Pero, ¿cuáles son los alimentos que más dañan nuestro corazón? ¿Con qué ingredientes dañinos están elaborados? La Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard publicó hace algún tiempo un artículo sobre los tres productos que debemos evitar a toda costa. «Si estás cuidando la salud de tu corazón, los siguientes alimentos no deben figurar en tu plan de comidas con demasiada frecuencia. De hecho, si puedes eliminarlos de la dieta, tu corazón estará más sano», advierte la reputa institución.
Carne Procesada
En 2015 la OMS emitió un famoso informe en el que, tras años de estudios científicos, se posicionaba en contra del consumo de carne procesada: salchichas, hamburguesas, salchichón, bacon, tocino y embutidos en general. El motivo no es otro que su estrecha relación con el cáncer.
La Universidad de Harvard recomienda que huyamos de este tipo de productos o comerlos como máximo dos veces a la semana. «Los estudios observacionales a largo plazo han encontrado que los peores tipos de carnes para el corazón son aquellos que se procesan. Es probable que los altos niveles de sal y conservantes que se encuentran en las carnes procesadas sean parte del problema», dice la institución.
Cereales refinados
El pan blanco, los cereales de desayuno cargaditos de azúcar, o el arroz blanco son un problema para la salud. No lo decimos nosotros, algunos prestigiosos investigadores llevan tiempo avisando al respecto. ¿Cuál es la razón? «Los altos niveles de procesamiento eliminan muchos de los componentes más saludables en los granos enteros, como la fibra, algunos minerales, fitoquímicos y ácidos grasos», dice la Universidad de Harvard.
En segundo lugar, el procesamiento también destruye la estructura natural de los cereales y acaba provocando unos picos mucho más altos de azúcar en la sangre que las versiones integrales. Además, tal y como señala del departamento de Salud Pública, también «agrega muchos ingredientes que son poco saludables, como las grasas trans, sodio o azúcares». La alternativa, tal y como hemos explicado en EL ESPAÑOL, es la ingesta de granos integrales, cuyo consumo se asocia a un menor riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y también a un menor aumento de peso.
Refrescos y bebidas azucaradas
Los refrescos son el tercer grupo de alimentos que deberíamos evitar a toda costa si queremos seguir preservando nuestro sistema cardiovascular. El motivo no es otro que la ingente cantidad de azúcar que contienen. Una sola lata de Coca-Cola, por ejemplo, tiene alrededor de 35 gramos de azúcar, lo que equivale a casi 9 terrones. Tal y como explica la Universidad de Harvard, «las bebidas azucaradas tienen los mismos efectos nocivos en el corazón que los carbohidratos altamente refinados y procesados».
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