Gijón es un lugar de buen sabor para el Barcelona. Lo fue a lo largo de la historia y volvió a serlo este especial miércoles, en que dio un golpe de efecto a la Liga y regaló a Messi una doble celebración: su gol 300 en la Liga y el gol 10,000 en la historia del club azulgrana.

Para que el encuentro fuera ya totalmente especial, dejó Leo otro dato apuntado: en su cara a cara eterno con Cristiano Ronaldo marcó el argentino los goles precisos para avanzarle desde que ambos compiten con Real Madrid y Barcelona. Antes de que el portugués jugase en Roma, la Pulga lleva 346 goles por 345 de Cristiano.

Messi es una máquina de devorar estadísticas que a cada partido deja datos para ser recordados eternamente. Logró su gol número 300 (y después el 301) en Liga para sumar un total de 439 oficiales con el primer equipo del Barça. Y se dio el gusto de repetir en la estadística en los libros del club. Fue él quién en marzo de 2010 anotó el gol 9.000 de la historia del Barcelona… Y volvió a ser él quien marcó el 10,000 de esa lista legendaria.

Todo ello dentro de una tarde especial, que para muchos acabó siendo trascendente en el devenir de la Liga (ya aventaja en 6 puntos al Atlético y 7 al Real Madrid), y en un escenario especial al que, como otras leyendas, dejó su firma.

Porque El Molinón es un estadio especial para el barcelonismo. Allí conquistó el Barça en abril de 1974 uno de los títulos de Liga más venerados por los hinchas veteranos, ganando por 2-4 a lomos de un estratosférico Johan Cruyff para romper una sequía de 14 años sin título.

En este mismo estadio se disparó en 1997 el Barça de Van Gaal ganando por 1-4 y también ahí comenzó el encantamiento del equipo de Guardiola en 2008, ganando por 1-6 en la tercera jornada de una Liga que había comenzado torcida (derrota y empate) para que hubiera quien desde algunas tribunas periodísticas pidiera su inmediato despido por temer un desastre.

RECADO PARA CRISTIANO RONALDO
Por si no fuera todo suficiente, Messi le dio ‘un toque de atención’ a Cristiano Ronaldo en su carrera. Desde que el portugués llegó al Real Madrid en 2009, la voracidad goleadora de ambos ha sido, y es, impresionante.

Cristiano, antes de jugar en Roma con el Real Madrid en Champions, suma 345 goles en 330 encuentros; Leo disputó en Gijón su partido número 329 desde el inicio de la temporada 2009-10 (la primera de CR en merengue) y sumó su gol 346. Pero la carrera continuará.

Más allá de eso, lo que queda para redondear el asombro en cuanto a los números de Messi es que suma ya 439 goles oficiales en el Barça. Y tomando el dato de los 10,000 anotados por el club se llega a una conclusión bestial: Leo ha marcado el 4.39 por ciento del total de los goles de la historia del Barcelona. Imposible añadir adjetivos.