RedacciónLa Habana.-Las FARC le exigieron el jueves al gobierno colombiano la creación de mecanismos novedosos para sancionar a los responsables de haber generado víctimas de la guerra interna, pero rechazaron ser ellos los únicos que tengan que cumplir algún tipo de sanción por la violencia en la nación sudamericana.
«Nos hablan de cortes y tribunales, y doctrinas obsoletas, cuando podemos convenir mecanismos extrajudiciales novedosos, incluso de sanción, que partiendo de la verdad… hallen el camino cierto de la concordia y la paz», dijo a periodistas el comandante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Iván Márquez, durante la clausura de una de las rondas del proceso de paz entre ambas partes que se desarrolla en esta capital.
El tema de la justicia que se aplique a los responsables de las FARC o a agentes gubernamentales y de las Fuerzas Armadas es muy delicado en la mesa de conversaciones, pues los rebeldes alegan que no llegaron a estas negociaciones para rendirse incondicionalmente, sino a pactar con el gobierno una paz con justicia social.
«Jamás se podrá equiparar el derecho de rebelión con el terrorismo de estado», afirmó Márquez —cuyo nombre original es Luciano Marín Arango_, quien aseguró que en Colombia se penaliza la protesta social.
Las FARC y representantes del gobierno del presidente Juan Manuel Santos cerraron su 37ma ronda de conversaciones en La Habana con el anuncio de un acuerdo para crear una Comisión del Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición, que será constituida una vez que se firme el acuerdo final.
«Sólo a través del conocimiento de los hechos podremos transformar el futuro, evitando a toda costa que esto se repita», dijo el representante gubernamental Humberto de la Calle el jueves por la noche.
«Con la conformación de esta Comisión no estamos abonando un terreno hacia la impunidad. La verdad no mata la justicia. Por el contrario, el esclarecimiento de la verdad es una pieza fundamental de un sistema más amplio que incluirá también medidas judiciales», agregó.
Instalada a finales de 2012 en Noruega y luego trasladada a Cuba, la mesa de diálogo busca terminar con cinco décadas de enfrentamientos entre las FARC y el gobierno colombiano, un choque que ha dejado miles de víctimas.
Márquez aseguró que la guerrilla se congratuló de haber llegado a este convenio para la creación de la Comisión «que es parte de un sistema integral de verdad, justicia, reparación y no repetición».
El comandante guerrillero coincidió en este punto con De la Calle. «La paz necesita verdad», aseguró Márquez.
Actualmente en Colombia ya existe un Centro de Memoria Histórica de carácter gubernamental, el cual emite algunos informes y no tiene nada que ver con esta nueva Comisión anunciada por la mesa.
Además hace unos meses se creó una Comisión Histórica del Conflicto y sus Víctimas formada por 12 analistas seleccionados por ambas partes en la mesa, con seis representantes de cada una. Ellos escribieron su opinión sobre los orígenes del conflicto, los motivos por el que éste se alargó tanto y el impacto sobre las víctimas. El resultado fue un informe de 900 páginas que ya ha sido dado a conocer a la opinión pública.
Según el catedrático y analista Vicente Torrijos, quien participó en la redacción, «este informe es el insumo y el origen para esta comisión de la verdad recién creada».
La nueva Comisión anunciada el jueves por las partes será independiente de éstas y extrajudicial, y tendrá una duración de tres años, adicionales a los seis meses que se necesitarán para formarla.
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