Dominicano encargado de Brooklyn dice su gestión ha tomado medidas audaces

Hace un año, Antonio Reynoso marcó un hito importante en la ciudad de Nueva York, al ser electo y jurar como el primer presidente de origen hispano del condado de Brooklyn. La hazaña política definió además que por primera vez un dominicano estuviera al frente del máximo cargo de elección popular en un condado de la Gran Manzana. Una posición ejecutiva en la Administración Municipal neoyorquina, que antes ocupaba el actual alcalde, Eric Adams.

El pasado jueves 12 de enero en su primer discurso del “Estado del Estado” del condado más poblado de Nueva York y uno de los más grandes del país, Reynoso resumió sus primeros doce meses, como un tiempo de “acciones audaces en nombre de la gente”.

En su alocución, en la sede del New York City College of Technology, anunció que en su segundo año no va a parar, hasta superar los avances de 2022: “No estoy aquí para hacer mil cosas a medias. Estoy aquí para hacer cinco, seis o siete cosas que marcarán una diferencia real en la vida de las personas”.

El desafío que se traza el presidente del condado de Brooklyn, es gigantesco, pues se propone la titánica tarea de achatar las amplias curvas de desigualdades sociales, desequilibrios en el acceso a la salud y al empleo. Y dar golpes certeros a la pobreza.

En Brooklyn, casi uno de cada cinco residentes, cruza la línea de la pobreza, ocupando el primer lugar en toda la ciudad con la mayor cantidad de niños que viven en condiciones de vulnerabilidad, de acuerdo con los balances de la Fundación Comunitaria de Brooklyn. Otro dato importante que define este condado, es que más de 1/3 de los residentes nacieron en otro país.

En concreto

En medio de este contexto socioeconómico, Reynoso se ufana de haber hecho frente a una realidad revelada en otra información estadística:  Las mujeres negras tienen 9,4 veces más probabilidades de morir por complicaciones relacionadas con el embarazo que sus contrapartes blancas. Y un tercio de todas las muertes relacionadas con el embarazo en la ciudad de Nueva York ocurren en Brooklyn.

“Esta es una de las mayores injusticias de las que estamos siendo testigos. Prometí que cambiaría eso.Y no hago promesas, que no pueda cumplir. Hicimos algo que ningún presidente del condado había hecho”, reforzó en su discurso.

En efecto, se asignaron la totalidad de $45 millones a tres hospitales públicos para mejoras en la atención médica materna.

En abril de 2022, se conformó un Grupo de Trabajo de Salud Materna que reunió a un grupo de expertos para guiar los esfuerzos de reducir las fatalidades antes, durante y después del embarazo para las personas negras e hispanas.

Además lanzó una campaña de educación pública de $250,000 que conecta a los habitantes de Brooklyn, con una guía de recursos para un embarazo saludable.

Más allá de la salud materna

Paralelamente a la agenda de salud materna, Reynoso ponderó varias alianzas e inversiones en programas sociales dirigidos a vencer dos crisis sistémicas en ese condado: la falta de viviendas asequibles y la criminalidad.

“Sé caminar y masticar chicle al mismo tiempo”, bromeó para referirse que en su plan de inversión dirigió $2,3 millones de dólares a organizaciones comunitarias y $98,000 para asistencia de vivienda a organizaciones como Churches United for Fair Housing.

En su lista de logros puso en la lista que había dirigido $225,000 para reforzar los programas juveniles de prevención de violencia.

Peleando con tendencias históricas

El presidente del condado de Brooklyn se imagina el futuro, poniendo más recursos en las organizaciones comunitarias que ·”trabajan con la gente”, promoviendo más programas para reducir la brecha de la pobreza y destacando planes estructurales para la salud de la población en general.

Con base a lo referido por Reynoso, los datos de 2020 de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) mostraron que la esperanza de vida general en todos los grupos raciales y étnicos fue de 77,3 años. La esperanza de vida de los negros era de solo 71,8 años. Pero en ese condado, la esperanza de vida para las personas de color, fue de 68 años.

El Motín

Agregar comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.