El destino ha puesto otra vez al dirigente Luís Rojas y a sus Leones del Escogido en un terreno borrascoso, pero bien conocido para ellos: un juego de muerte súbita.
“Vamos a pisar un terreno conocido, por lo que estamos alertas pero no asustados”, dijo Rojas luego del dramático partido que perdieron anoche frente a Puerto Rico y que los lleva a un juego de vida o muerte frente a Cuba, en el último partido de la ronda regular de la Serie del Caribe, que mañana juega las semifinales para sacar a los dos contendores de la final.
Rojas, consciente de lo delicado de la situación para un equipo que no le ha puesto número a la casa (0-3), anunció a Edwar Cabrera como su abridor de esta noche, pero adelantando que ”todos los pitchers estarán disponibles”.
“No es la primera vez que vamos a jugar un partido de muerte súbita, ya lo hemos hecho antes y hemos salido airosos”, expresó.
Por: Bienvenido Carmona Jr