La visita de Hipólito a Danilo

POR ALBERTO QUEZADA

El expresidente Hipólito Mejía hace unos días visitó al expresidente Danilo Medina en su residencia y de lo tratado allí sólo ha salido a conocimiento de la opinión pública que se trató de un encuentro cordial entre los dos dirigentes políticos y exmandatarios.

Por lo expresado por el señor Hipólito Mejía luego de esa reunión, el motivo de esa visita no tenía otro interés u objetivo que no fuera el deseo de dos amigos y dirigentes políticos saludarse, ya que tenían mucho tiempo por verse.

Otro de los argumentos que motivaron el encuentro entre los dos líderes políticos, al decir del padre de la Alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, fue el darle muestras de solidaridad al amigo por estar pasando por una grave enfermedad.

Además, en su explicación el “Guapo de Gurabo” alega que siempre es importante que entre ex presidentes exista siempre una comunicación fluida con la finalidad de dialogar, hablar, intercambiar, sobre los principales problemas nacionales.

Esas fueron más o menos las razones de la reunión, según lo expresado por el expresidente Hipólito Mejía, luego de ser abordado por los periodistas en el seminario para legisladores celebrado el pasado fin semana por las autoridades del Partido Revolucionario Moderno(PRM).

En honor a la verdad, el que lee con detenimiento las razones justificativas del expresidente de la República Dominicana 2000-2004 no hace otra cosa que estallar en risas, que a propósito son necesarias en este tiempo de tanta violencia y carencia espiritual y emocional.

Digo que son risibles las razones que expone el expresidente Mejía, porque todo el que tenga dos pulgadas de formación política y conocimiento de la realidad social dominicana sabe muy bien que el argumento dado a conocer a los medios de comunicación no fueron los únicos y más importantes temas tratados por ambos en ese encuentro.

Desde luego, las razones fundamentales y reales de esa reunión, amables lectores, no fueron ni serán dadas a conocer de manera pública a nadie por ahora, son asuntos de alta política, estratégicos y programáticos, que sólo el tiempo desnudará de manera total.

Sin embargo, con esa vista del expresidente Hipólito Mejía a su amigo Danilo Medina, comienza amarrar temprano, marca territorio y envía señales de que el proyecto político presidencial de su hermosa y simpática hija Carolina Mejía es una realidad y que en el mismo como es natural y legítimo él jugará un papel de primer orden. No hay dudas.

El autor es periodista y magíster en derecho y relaciones internacionales. Reside en Santo Domingo.quezada.alberto218@gmail.com  

 

 

El Motín

Agregar comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.