Secretos de los siquiatras

¿Sabes qué es lo que saben los terapeutas que nos dejaría helados a la mayoría?

(Tomado de Quora)

Te cuento algo que pocos conocen y que es como el secreto mejor guardado de la profesión, algo que se mantiene oculto detrás de esa famosa confidencialidad entre médico y paciente.

Te pongo el ejemplo de mi amiga Celia. Ella es psiquiatra infantil y, aunque no lo creerías, está constantemente batallando con sus propios pensamientos. Imagínate: después de 11 años estudiando medicina y psiquiatría (en realidad fueron 12, porque pasó uno internada por una anorexia que casi le cuesta la vida), uno pensaría que tendría todo resuelto, ¿no?

Pero no, la cosa no es tan simple. La anorexia sigue ahí, como un fantasma que no la suelta. Anda todo el día contando calorías, escondiendo comida disimuladamente bajo los cubiertos y saltándose comidas. Su esposo está desesperado, pero ¿qué puede hacer? Aunque su peso ya está bien, se tortura cada vez que se mira al espejo y vive obsesionada con la báscula, como si fuera su peor enemiga.

Lo curioso es que Celia ayuda profesionalmente a niños con problemas mentales, mientras su propia cabeza es un torbellino. Te hace preguntarte: ¿cómo puede ayudar a otros a desenredar sus problemas cuando ella misma está enredada en los suyos?

Y mira, Celia no es un caso único. La mayoría de los psiquiatras que conozco han pasado por sus propias crisis mentales gordas (y muchos siguen lidiando con ellas). Es como si fuera algo común en la profesión: se meten en la psiquiatría precisamente porque conocen de primera mano lo que es tener problemas mentales.

Hoy en día vemos algo parecido por todos lados: gente que se vuelve coach de trauma por sus propias experiencias, mamás que se convierten en asesoras de parto después de tener uno traumático, personas que acaban siendo terapeutas de divorcios después de pasar por uno horrible. Es como si el trauma personal fuera un título profesional.

Yo mismo me divorcié y fue bastante feo, pero eso no me hace experto en divorcios, ¿verdad? Al contrario. Todos estos nuevos «terapeutas por experiencia» están básicamente proyectando sus propios traumas sobre sus pacientes, y así no es como debería funcionar una terapia de verdad.

La cosa es que esto no es nuevo: ha estado pasando en la psiquiatría y la psicología desde siempre, como un elefante invisible en la habitación que nadie quiere ver. Porque, seamos sinceros, haber sufrido un trauma no te hace experto… te hace paciente.

Y tú, ¿qué opinas?

El Motín

Agregar comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.