El MotínEn medio de fuertes medidas de seguridad, en Haití se realiza el acto final de las honras fúnebres del presidente Jovenel Moïse, quien fue asesinado el pasado 7 de julio por un comando de mercenarios que ingresó a su residencia en Puerto Príncipe.
El féretro del jefe de Estado arribó poco antes de las 08H00 (hora local) a la que fuera la casa de su padre, donde descansarán sus restos en un nicho erigido tras su deceso. La Guardia de Honor acompañó el cuerpo.
Durante su intervención en la ceremonia, la primera dama Martine Moïse, denunció que contra su esposo hubo un complot que terminó en su asesinato.
Además, afirmó el mandatario siempre trató de hacer «más y mejor por el pueblo», por lo cual combatió al «sistema podrido» que, según dijo, terminó por atacarlo a él mismo.
El lugar de la ceremonia se acondicionó para acoger a cerca de 3.000 invitados y fue inspeccionado un día antes por el director general de la Policía Nacional de Haití, Léon Charles.
La despedida al exmandatario inició a las 08H30 (hora local) y se prevé que concluya a las 13H00 (hora local), tras lo cual corresponderá presentar saludos fúnebres a la primera dama, Martine Moïse, y demás integrantes de la familia presidencial.
A la cita también asiste el recientemente investido primer ministro, Ariel Henry, quien participó en una vigilia realizada en el hotel Henri Christophe en memoria del mandatario asesinado.
Asimismo, la oficina de prensa del primer ministro emitió un comunicado en el que se desmiente que la caravana de autos en que Henry viajó a Cabo Haitiano fue emboscada y atacada en las inmediaciones de la ciudad.
Como parte de los homenajes a Moïse, residentes en la localidad asistieron a una misa y a una marcha pacífica en su honor, en la que demandaron justicia y que sus restos no reciban sepultura hasta tanto no concluya la investigación en marcha para conocer a los responsables de su muerte.
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