Reacción ante el palo acechao de la JCE-Gobierno

Por Juan López

En fino contubernio  con el gobierno del PRM-Abinader, la Junta Central Electoral (JCE) con su desfasado y perturbador “comunicado de admonición”, del pasado 10 de agosto, pretende dar un “palo acechao” a los partidos, agrupaciones  y movimientos políticos de la oposición.

En dicho adefesio, la JCE, en mancuerna con  el gobierno del PRM-Abinader,  dispuso “…que los partidos deben detener de inmediato la celebración de eventos multitudinarios como los mítines, marchas, caravanas y la divulgación de propaganda electoral como la colocación de vallas, afiches, pancartas, en espacios y lugares públicos.

También deben  cesar la promoción de los aspirantes a través de medios de comunicación como la radio y la televisión… mientras que la publicidad que ya está instalada, “ordenó su remoción en un período no superior a los 15 días”.  Advirtiendo  que en caso de mantener la publicidad o realizar alguna actividad política masiva, se estaría multado a los partidos políticos o candidatos responsables.” ¡Qué barbaridad!

A propósito, los señores miembros del Pleno de la JCE ¿tendrán conocimiento de los altos costos en dineros y esfuerzos que se invierten en las contrataciones e instalaciones de las vallas y otras publicidades?

Como era de esperarse, la dirección del PRM, aplaudió el pretendido palo acechao, publicando un comunicado respaldando a la JCE y  suspendiendo las  actividades que, supuestamente, había programado.

Mientras tanto,  el presidente Abinader  seguirá efectuando actividades oficiales (¿?),  masivas, públicas, al aire libre  y reeleccionistas.  En ese propósito realizarán actividades en Cabo Rojo, Pedernales y en Santiago, el próximo 16 de agosto.

En legítima reacción, el PLD y FP,  haciendo uso de sus derechos, rechazaron dicha admonición, en interés de que el actual proceso electoral prosiga desarrollándose en forma pacífica,   equitativa y democrática. Y amparado en los derechos consagrados en la Constitución (Art. 48 y 49) continuarán realizando sus actividades proselitistas.

También recordaron a la JCE y gobierno del PRM-Abinader que la pretendida admonición llega muy tarde, es improcedente,  violatoria de derechos adquiridos y contradice sentencias, que para evitar violaciones de la Constitución, habían dictado el Tribunal Constitucional (TC) y el Tribunal Superior Administrativo  (TSA)

Efectivamente, fueron declarados nulos varios artículos de la Ley de Partidos Políticos, incluido el No. 44 que ahora está usando la JCE y el gobierno del PRM-Abinader para su pretendido “palo acechao” contra la oposición.

El TC mediante sentencia No. TC/0052/22, del 22 de febrero de 2022, manifestó que la libertad de  expresión y la libertad de reunión son derechos que no pueden ser limitados, por tanto la decisión de la JCE  carece de efecto legal porque las decisiones del TC son vinculantes a todos los órganos de poder del Estado.

En la indicada sentencia se estableció de manera concreta que el numeral 7, del Art. 44 de la Ley de Partidos,  que prohíbe “la promoción política a través de mensajes publicitarios colocados y transmitidos por los diferentes medios de comunicación radial y televisiva”, no era conforme con la Constitución, por lo que procedió a declarar su nulidad.

También el TSA con su sentencia No. 0030/04/19, del 23 de septiembre de 2019, declaró inaplicable, entre otros, el numeral 2, del artículo 44 de la Ley de Partidos, sobre la prohibición de “vallas, afiches, pancartas, en espacios y lugares públicos”, puesto que vulnera el derecho de igualdad, al crear una situación de desigualdad entre diferentes medios de comunicación y violaba la libertad de empresa.

Cuando una ley, resolución  o disposición es injusta e ilegal, lo correcto es desobedecerla”. Por lo tanto, los partidos de oposición en uso de sus legítimos derechos pueden y deben continuar con sus actividades proselitistas, so pena que la JCE y el gobierno del PRM-Abinader quieran usar los recursos del Estado para dar un palo acechao a los partidos y organizaciones de la oposición, con ¡peligrosas consecuencias imprevisibles! ¡Ojala la JCE recobre la cordura, la prudencia y el sentido común!

El Motín

Agregar comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.