RedacciónDani Rovira ha sido el encargado de conducir, por tercer año consecutivo, la gala de los Premios Goya. Era la trigésimo primera edición de los premios que otorga la Academia de Cine y la ceremonia se ha desarrollado con muchísima más agilidad que en otras ocasiones.
Con una orquesta sinfónica sobre el escenario, la Film Simphony Orchestra, la gala ha estado plagada de música y de buenos momentos propiciados, sobre todo, por los entregadores.
El presentador no ha conseguido levantar las malas críticas de los últimos dos años a pesar de su intento de hacer un llamamiento sobre la falta de mujeres en la industria las redes sociales han vuelto a cebarse con el actor.
Y es que a veces es mejor dejar a las propias mujeres que se expresen, ¿qué tal una presentadora para el año que viene?
Fuera de polémicas los Goya han reconocido el buen hacer en las categorías técnicas de Un Monstruo Viene a Verme (película a la que la mayoría se han encargado de rebautizar como ‘Un mostro viene a verme‘) la cual también se ha alzado con el premio a mejor director para J.A. Bayona, todo un reconocimiento al que es en este momento el director más internacional que tiene España (con permiso de Pedro Almodóvar).
Ana Belén, Goya honorífico a toda su carrera, también ha querido recordar las pocas mujeres que todavía son reconocidas en el cine. La gala ha tenido también momentos anti-Trump y hasta Silvia Pérez Cruz, ganadora del premio a mejor canción, se ha atrevido a cantar ante el auditorio una canción por los desahuciados.
Manolo Solo, Emma Suárez, Anna Castillo, Carlos Santos y Roberto Álamo son los actores y actrices más sobresalientes de 2016. La protagonista de Julieta, además, nada menos que con dos estatuillas, la de mejor actriz secundaria por La Próxima Piel y por su protagonista.
Tarde para la ira ha sido la mejor película de 2016.
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