El MotínPUERTO PRÍNCIPE.-Los hechos tienen lugar en la previa de la llegada de una fuerza de intervención internacional, a cargo de Kenia, cuyo presidente, William Ruto se encuentra justo en EE.UU.
Un grupo misionero con sede en Oklahoma, Estados Unidos, que trabajaba en la capital de Haití fue atacado por bandas armadas el jueves por la noche, dejando dos estadounidenses y el director del grupo muertos, anunció la organización Misiones en Haití.
Misiones en Haití administra una escuela para 450 niños, así como dos iglesias y un hogar para niños en el vecindario Bon Repos en las afueras del norte de Puerto Príncipe, que es ampliamente conocido por estar controlado por dos pandillas locales. La organización independiente sin fines de lucro fue fundada por una pareja de Oklahoma, David y Alicia Lloyd, en 2000.
El ataque ocurrió el jueves, luego de que dos grupos diferentes de pandillas invadieran el recinto de la organización, atacaran a los empleados y robaran los vehículos de la organización.
Las víctimas fueron el hijo de los fundadores, David Lloyd III, de 23 años, conocido como Davy; su esposa, Natalie Lloyd, de 21 años; y el director haitiano de la organización, Jude Montis, de 20 años, dijo el grupo.
Los Lloyd salían de una sección del complejo de la misión cuando fueron emboscados por tres camiones llenos de hombres, según David Lloyd Jr., cuyo hijo fue asesinado.
El joven Lloyd fue llevado adentro y golpeado, dijo su padre. Luego, los pandilleros se llevaron los vehículos y otros elementos de la organización y se marcharon. Pero las cosas cambiaron cuando apareció una segunda pandilla y uno de sus miembros fue asesinado.
“Ahora esta pandilla entró en modo de ataque total”, dijo la organización en una publicación escrita antes de que los tres fueran asesinados.
Al parecer, los Lloyd y el director del programa pudieron hacer llamadas a través de un enlace de Internet satelital y contar lo que estaba sucediendo mientras ocurría, describiendo cómo estaban escondidos mientras los pandilleros disparaban por las ventanas.
Los hechos tienen lugar en la previa de la llegada de una fuerza de intervención internacional, a cargo de Kenia, cuyo presidente, William Ruto se encuentra justo en EE.UU.
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