Algunos dicen que Perry se ha convertido en una diva insoportable desde que actuó en la Super Bowl, las malas lenguas susurran que su actitud arrogante podría incluso estar acabando con su noviazgo junto a John Mayer.
Viendo las fotos que hoy os traigo, el rostro de Katy parece coincidir con la descripción de una chica endiosada que se cree superior a Miley. Por otra parte podría simplemente ser la cara de “¿Qué narices haces tocándome una teta?”, eso ya lo dejo a vuestro juicio.
Este momentazo un tanto bochornoso para ambas se produjo durante la celebración de los Grammy. La prensa pidió una foto de Miley junto a Katy y a la rubia no se le ocurrió otra cosa que posar sujetando el pecho de la morena reconvertida a púrpura.
Mientras Cyrus posa con la boca abierta, como de costumbre, y con una expresión forzada, Perry no se esfuerza ni siquiera en sonreír. La cantante se quedó seria, con rostro claramente molesto y deseando acabar con la situación.
Katy Perry calienta la Super Bowl
Entiendo que Katy sintiera vergüenza ajena con las chorradas de Miley, de hecho le tendría que haber apartado la mano pero supongo que no quiso humillarla y que luego todos los fotógrafos hablasen de su mala relación.
Este episodio me recuerda al día que Miley besó en la boca a Katy sin su consentimiento durante el Bangerz Tour y posteriormente Perry la puso a parir, ¡pero Miley no aprende! ¿Lo hizo Cyrus para molestar a Perry? ¿Creéis que Katy actuó correctamente al no llamarle la atención y aguantar el tipo con cara de besugo al horno?
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