El MotínBERLIN.-‘La guerra está aquí’. Con esa frase se podría resumir el parecer y la sensación de numerosos países occidentales. En muchos casos ha podido parecer una alarma innecesaria, un intento por alarmar a la población europea o algo similar.
Sin embargo, con el paso de los meses, se han podido comprobar diferentes cambios estratégicos en todos los órdenes: militares, económicos y sociales. El último movimiento conocido ha corrido a cargo nada menos que de Alemania.
Según informó el Ministerio de Defensa, un total de 800.000 soldados alemanes se ubicarán el próximo 25 de septiembre en Hamburgo. Este ejercicio, bautizado como ‘Red Storm Bravo’ tendrá lugar en la localidad germana y contará con un gran despliegue de personal militar, vehículos de carga, helicópteros y hospitales móviles.
Esta decisión del gobierno alemán se produce ante la posibilidad de que en muy poco tiempo hiciera falta desplazar a miles de efectivos militares de la OTAN al flanco oriental en caso de que la guerra entre Rusia y Ucrania adquiriera tintes bélicos mayores.
En palabras del capitán Kurt Leonards, esta vez, el rol de Alemania es muy distinto al que desempeñó durante la Guerra Fría, cuando Alemania era el centro de batalla. Ahora, en cambio «es la retaguardia de la OTAN», afirma el alto mando militar.
Así, y según han publicado varios medios alemanes, los ejercicios que se llevarán a cabo incluirán evacuación de víctimas, asistencia médica y simulacros de protestas. Todo esto se enmarca en la posibilidad de que Rusia intente un ataque contra espacio OTAN en los próximos 4 o 5 años.
Según Leonards, «la amenaza es real», y asegura que desde hace meses «estamos sufriendo ataques a nuestra infraestructura», por lo que asegura que este tipo de ejercicios, que simulen un escenario de guerra total en ‘casa’ tiene una importancia trascendental y sin precedentes en las últimas décadas.
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