Se había dicho de la grandeza de Manu Ginóbili como el mejor jugador de baloncesto en la historia de su país y también uno de los «buenos» dentro de la NBA, pero le faltaba la noche de la retirada de la camiseta con el Nº. 20 que vistió durante 16 años con los Spurs de San Antonio para que tuviese la consagración definitiva.
El AT&T Center de San Antonio, el escenario de tantos éxitos deportivos conseguidos por Ginóbili, nada menos que cuatro títulos de liga con los Spurs, lo recibió a los pocos meses de haber dado su «adiós» definitivo al baloncesto activo y lo hizo para reconocerle que sin él nunca hubiesen podido ser una nueva dinastía en la NBA.
Lo reconoció otro legendario de la franquicia tejana, el entrenador Gregg Popovich, quien en el discurso previo a la retirada de la camiseta de «Manu» fue el que mejor definió en toda la noche la figura de Ginóbili.
«Su mentalidad ganadora y espíritu de lucha es algo que nunca he visto en mi vida como profesional», destacó Popovich. «Nos impregnó carácter ganador, que sin él nunca lo hubiésemos conseguido».
Además, Popovich también hizo extensivo la clase y talento mostrada por Ginóbili al resto de la «Generación Dorada» del baloncesto argentino, a la que definió como «uno de los mejores equipos que vi en mi vida».
A partir de ahí, la consagración de Ginóbili era ya oficial al igual que la de la selección argentina que se proclamó Campeona del Mundo y Olímpica.
En medio de tanta alabanza merecida y justa, a la figura de Ginóbili, el baloncesto argentino y el latinoamericano elevaban como nunca la imagen al más alto nivel dentro del mejor del mundo.
Como en su tiempo lo hizo también el panameño Rolando Blackman, a quien los Dallas Mavericks otorgaron también la distinción de la retirada del número de su camiseta, el primer latinoamericano que lo consiguió en la NBA.
Con Ginóbili también se mostraba la mejor imagen deportiva de un gran país como Argentina, con figuras de la talla excepcional de Diego Armando Maradona y Lionell Messi, con los que ya quieren comparar a Ginóbili.
Al menos eso fue lo que hizo el periodista Adrián Paenz, moderador de la presentación en el medio tiempo y en español de los compañeros de la Generación Dorada que llegaron al AT&T Center encabezados Fabricio Oberto, Luis Scola, Alejandro Montecchia, Pablo Prigioni, Andrés Nocioni, Pepe Sánchez y Gabriel Fernández.
Todos ellos, en clave de humor y con anécdotas personales, alabaron la figura de Ginóbili en el apartado más humano, de compañero, amigo, y persona que siempre está ahí para ayudar a los demás.
Con la única nota discordante fue de nuevo la «mala» fama que Nocioni le ha generado en cuanto a lo «desordenado» que era Ginóbili cuando tenían que compartir ambos la misma habitación en las concentraciones, especialmente la que vieron en los últimos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
«Ustedes lo querrán mucho aquí, en San Antonio, a Manu, pero es porque no les ha tocado tenerlo de compañero en la habitación como me ha pasado a mi y de verdad que es muy desordenado», comentó Nocioni a los aficionados que llenaban las gradas del AT&T Center.
Mientras que Paenza agradeció todo el apoyo que San Antonio le ha brindado a Ginóbili con el reconocimiento que siempre estará unida a la grandeza del mejor jugador del baloncesto en la historia de argentina, como Napoli lo está a la figura de Maradona y Barcelona a la de Messi.
Para concluir Paenza destacó que «Manu es uno de los mejores, sino el mejor deportista de la historia argentina».
Ya fuera del campo, todos los compañeros de Ginóbili reiteraron que nada de lo que se dice de él es suficiente para mostrar la clase humana y profesional que posee.
Mientras que el entrenador asistente de los Spurs de San Antonio, Ettore Messina, que fue quien primero dirigió a Ginóbili cuando llegó al baloncesto del país europeo, reconoció que nunca pensó que llegase tan alto.
«Pero lo más importante es que sigue siendo la misma persona que hace 20 años», destacó Messina. «No ha cambiado nada desde que era aquel chico en su actitud de humildad, carácter y entrega. Por eso hoy veremos a mucha gente llorando, incluido yo», declaró Messina antes que diese comienzo el partido que los Spurs ganaron por 116-110 a los Cavaliers y se lo dedicaron a Ginóbili.
Depués llegaría el momento histórico de la ceremonia de la retirada del número 20, en la que se dio a conocer el mensaje de felicitación enviado por el presidente de Argentina, Mauricio Macri, y el nombre Ginóbili quedó inmortalizado junto al de Johnny Moore (00), Avery Johnson (6), Bruce Bowen (12), James Silas (13), Tim Duncan (21), Sean Elliott (32), George Gervin (44) y David Robinson (50).