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Hoy miércoles 27 de mayo se cumplen 25 años del accidente que dejó tetrapléjico y con respiración asistida a Christopher Reeve. El actor, conocido por la saga de Superman , se encontraba en un concurso de equitación en Virginia cuando, al intentar superar un obstáculo, se cayó desde su caballo y se rompió la médula espinal, lo que le provocó un daño irreversible. «Ha sufrido fracturas complejas en la primera y la segunda vértebras cervicales. No puede moverse ni respira espontáneamente. Puede que requiera cirugía para estabilizar la parte superior de la columna en un futuro cercano», reveló su neurocirujano al Washington Post un par de días después. Y a la semana siguiente, el intérprete fue sometido a una operación.
«El actor Christopher Reeve ha sido sometido hoy a una cirugía que espera le permita asentir y mover la cabeza, pero los médicos dicen que ninguna operación podrá devolverle el movimiento de cuello para abajo», publicó el New York Times ese día. Pese a ello, Reeve -que, posteriormente, confesó que también debió luchar contra sus pensamientos suicidas– no logró recuperar ningún porcentaje de su movilidad hasta 2002, cuando logró movilizar sus dedos y, según medios como People, «sentir el tacto de otra persona e incluso los abrazos de su mujer y sus hijos». «Siempre se ha creído que la mayor parte de la recuperación ocurre en los primeros seis meses y que si no se completa en dos años, todo ha terminado. Pero la mejora de Reeve cambia realmente el campo del juego en términos de lo que es posible», declaró entonces el Dr. John MacDonald a CNN.
Tras aquel milagro, Reeve comenzó a tener una rutina de recuperación en su casa, que incluía estimulaciones en músculos y electrodos en sus extremidades. Además, Reeve debía ser conectado a un ventilador, a través de su garganta, mientras que también se le conectaba una válvula, que recogía su orina en un tubo oculto en su pierna. «A veces ni siquiera me doy cuenta de lo que están haciendo. Mi mente se aleja kilómetros. Todo se ha convertido en una rutina de segunda naturaleza. Pero nunca he soñado que estoy discapacitado, nunca», dijo a The Guardian en 2002. Aun así, el artista intentaba que su ánimo no decayera para ayudar a los demás con su experiencia.
Por eso fundó The Christopher Reeve Foundation, una asociación en favor de las personas parapléjicas y tetrapléjicas, que creó de la mano de la cantante y actriz Dana Morosini, su esposa, quien lo cuidó hasta el día de su muerte. Reeve falleció en octubre de 2004, después de sufrir un ataque cardiaco, que lo llevó a un coma. No obstante, su familia aseguró estar tranquila y sentir un inmenso cariño por todos los fans que apoyaron a Christopher durante años. Por otra parte, Dana continuó con su lucha por visibilizar a quienes sufren de parálisis. Sin embargo, su luz se apagó el 6 de marzo de 2006, cuando murió a raíz de un cáncer de pulmón, que se le desarrolló de forma asintomática. A pesar de ello, de acuerdo con una de sus últimas entrevistas, Dana mantuvo su positivismo hasta el último de sus días. Aunque algo le preocupaba más que cualquier otra cosa: que su hijo William Reeve quedase huérfano.
Afortunadamente, William nunca se quedó solo, porque sus hermanos Alexandra y Matthew Reeve (hijos de Christopher y de quien fuese uno de sus grandes amores, Gae Exton) decidieron cuidar de él. Hoy, William tiene 27 años, es periodista y es muy conocido en Estados Unidos por su trabajo en espacios como SportsCenter de ESPN. De hecho, el año pasado Reeve generó numerosos titulares después de compartir con la cadena CBS la carta que escribió para sí mismo cuando murió su madre: «Te tengo dos noticias: la mala es que estás en el punto más bajo de tu vida. Acabas de decirle adiós a tu mamá. Se fue, al igual que tu papá. Pero aquí va la buena noticia: este es el punto más bajo en el que puedes estar. No hay otro lugar para ir que hacia arriba y ahí es donde te encaminas», redactó.
El nombre de William también se ha vuelto viral este abril, después de que apareciera sin pantalones en una conexión en directo para el programa Good Morning America desde su casa. Pero él y sus jefes se tomaron la anécdota con humor y, días más tarde, apareció en pantalla dando consejos de etiqueta para asistir a reuniones por Zoom. Su hermana Alexandra también ha aparecido numerosas veces en la prensa. Por ejemplo, en 2015, cuando decidió llamar a su primer hijo como su famoso padre; en 2019, cuando contó a Fox que la fundación de Christopher sigue activa y que ella y su hermano Matthew, escritor de la serie de detectivesHamilton, colaboran activamente en ella. «Es un honor continuar con el trabajo de mi padre, quien nunca descansó ni un solo día para pelear por conseguir fondos para la investigación», recordó a Matthew, según Closer Weekly, en 2018.
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