Despliegue militar masivo en la frontera de Texas con México

EE.UU.-Texas enviará 400 miembros de la Guardia Nacional del estado a la frontera entre Estados Unidos y México para trabajar con agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, dijo el gobernador Greg Abbott el lunes.

Abbott envió miembros de la Guardia Nacional de Texas a la frontera bajo su iniciativa Operación Estrella Solitaria que fue creada para frenar la inmigración ilegal, con alrededor de 4100 guardias nacionales del estado actualmente asignados a la misión fronteriza.

Abbott dijo en su declaración que se enviarán de inmediato miembros de la Fuerza Táctica Fronteriza desde las bases de Houston y Fort Worth. También se enviarán a la frontera aviones de transporte militar C-130 y helicópteros militares Chinook, agregó.

«Texas tiene un socio en la Casa Blanca con el que podemos trabajar para asegurar la frontera entre Texas y México», dijo el gobernador republicano en una declaración escrita.

Imágenes de video capturadas la semana pasada parecen mostrar a funcionarios de Texas instalando una barrera hecha de boyas en el Río Grande en su área de cruce fronterizo—una táctica que enfrentó demandas y prolongadas batallas judiciales.

Durante el mandato del expresidente Joe Biden, Abbott se enfrentó con frecuencia con el gobierno federal por la inmigración ilegal. El año pasado, Abbott se enfrascó en un enfrentamiento con funcionarios federales y ordenó a la Guardia Nacional de Texas que impidiera a los agentes de la Patrulla Fronteriza entrar en el paso fronterizo de Eagle Pass.

Además de los guardias de Texas, la Oficina de la Guardia Nacional confirmó el 22 de enero que enviaría 1600 soldados adicionales a la frontera para cumplir con los requisitos de fuerza federales. El mismo día, el secretario de Defensa en funciones, Robert Salesses, anunció el despliegue de 1500 soldados estadounidenses más en servicio activo (1000 del Ejército y 500 de la Infantería de Marina), lo que eleva el total a unos 4000 militares estadounidenses en la frontera sur.

En ese despliegue, el ejército estadounidense está proporcionando dos aviones C-130 Hércules, dos aviones C-17 Globemaster y helicópteros militares UH-72 Lakota como parte del esfuerzo contra la inmigración ilegal y la seguridad fronteriza, dijo el Pentágono.

No está claro si alguno de los aviones recién desplegados se utilizó para deportar a inmigrantes ilegales que fueron detenidos por funcionarios de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) en los últimos días como parte de una ofensiva más amplia contra la inmigración ilegal que se inició después de que el presidente Donald Trump asumiera el cargo.

En posteos en las redes sociales, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, confirmó que los vuelos de deportación habían comenzado. Compartió una foto de lo que parecían ser hombres esposados ​​mientras eran conducidos a bordo de un avión militar estadounidense.

Durante el fin de semana, estalló una guerra verbal entre Trump y el presidente colombiano Gustavo Petro por los aviones militares que se están utilizando para deportar a ciudadanos colombianos a su país de origen. El domingo por la mañana, Petro dijo que bloquearía esos vuelos, lo que hizo que Trump amenazara con fuertes aranceles y otras sanciones antes de que el gobierno colombiano aceptara el regreso de los deportados colombianos.

En Truth Social, Trump dijo que estaba buscando restricciones de visas, aranceles del 25 por ciento sobre todos los productos colombianos entrantes, que se elevarían al 50 por ciento después de una semana, y otras medidas de represalia provocadas por la decisión de Petro. Petro también anunció aranceles colombianos de represalia sobre los productos estadounidenses.

Más tarde ese día, Leavitt dijo en una declaración que el «Gobierno de Colombia aceptó todos los términos del presidente Trump, incluida la aceptación sin restricciones de todos los extranjeros ilegales de Colombia que regresen de Estados Unidos, incluso en aviones militares estadounidenses, sin limitaciones ni demoras».

El gobierno colombiano dijo el domingo por la noche que había «superado» el episodio con la administración Trump y Petro reposteo la declaración de la Casa Blanca el día X.

«Hemos superado el impase con el gobierno de los Estados Unidos», afirmó el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo.

«Seguiremos recibiendo a los colombianos que retornan como deportados, garantizándoles condiciones dignas como ciudadanos sujetos de derechos». Fuente: The Epoch Times en español

El Motín

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