Rusia llevó a cabo un ataque masivo contra el sistema eléctrico de Ucrania, utilizando alrededor de 100 drones y más de 90 misiles, el cual dejó un millón de personas sin electricidad al oeste. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, informó sobre este asalto en sus redes sociales, subrayando que algunos de los misiles utilizados contenían munición de racimo.
Al menos 523,000 abonados al sistema se han quedado sin electricidad por los daños causados por el ataque a infraestructuras eléctricas en la región de Leópolis, frontera con Polonia. Asimismi, el número de afectados es de 280,000 en la región vecina de Rivne, y 215,000 no tienen luz en la de Volinia.
“Estas municiones de racimo complican de forma significativa el trabajo para reparar los daños provocados por el ataque”, precisó Zelenski, quien ha calificado este último bombardeo como “una escalada perversa de las tácticas terroristas rusas”.
El mandatario calificó este bombardeo como “una escalada perversa de las tácticas terroristas rusas”, enfatizando la gravedad del impacto en la infraestructura crítica del país. Los misiles involucrados en el ataque son principalmente misiles de crucero Kalibr, que han sido utilizados frecuentemente por Rusia para atacar territorio ucraniano.
Entretanto, Zelenski expresó su agradecimiento a los trabajadores de emergencias y al personal del sector eléctrico por sus esfuerzos en mitigar las consecuencias del bombardeo. Este ataque representa el undécimo asalto masivo contra el sistema eléctrico ucraniano desde marzo pasado.
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