RedacciónLa Fiscalía del Distrito Nacional fue apoderada de una investigación que involucra a cientos de personas afectadas por estafas en la compra de vehículos.
Según datos suministrados a este portal, Rafael Francisco Castillo Fuerte alias Frank Castillo, realizó supuestamente las estafas, mediante en el dealer Hiamco Importación ubicada en la avenida Luperón del sector Los Ríos, el cual ha embaucado con valores o matriculas a diferentes dealers, empresas financieras y bancos.
La Fiscalía del Distrito Nacional se encuentra apoderada de varias querellas depositadas por el abogado Cesar Amadeo Peralta, quien fue apoderado por varios de los afectados.
Según el expediente, el imputado vendía un mismo vehículos a dos personas, quedando pendiente de entrega la matricula original y en otros casos empresas financieras con matrículas en garantía, ya que se daban diferentes modalidades.
Otra de la forma de engañar a los clientes, eran personas que le dieron a vender sus vehículos y este los vendía, los cobraba, no les entregaba las matrículas, afectando con esta situación a muchas personas que no pudieron renovar sus marbetes.
Según reposa en las querellas depositadas, se encuentran unas 130 matrículas originales, cuyos propietarios reclaman a la empresa Hiamco Importación y al señor Frank Castillo el pago de dichos vehículos, lo que motivó que la Fiscalía realizara un allanamiento en las instalaciones del dealer Hiamco Importación con la finalidad de recabar pruebas de los ilícitos penales que se le imputan.
La magistrada Nayra Richardson, procuradora fiscal adjunta ante el Departamento de Investigaciones de Crímenes y Delitos contra la Propiedad, está el caso y que en los próximos días se apresta a depositar acusación formal en contra de los directivos y gerentes de la empresa Hiamco Importación, por el hecho de que mucho de los afectados se presentaron y en algunos casos saldaron dichos vehículos.
El imputado Rafael Francisco Castillo Fuerte alias Frank Castillo, la empresa Hiamco Importación y sus gerentes, están siendo acusados por falsificación, estafa y abuso de confianza y, de ser hallados culpables, podrían enfrentar penas de hasta 10 años de prisión.
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