Abogado plantea declarar “irrecibibles” en el CNM denuncias procurador contra Germán

El abogado y comunicador Miguel Melenciano consideró que el secretario del Consejo Nacional de la Magistratura debió declarar “irrecibibles” los documentos que presentó el procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, contra la jueza Miriam Germán Brito, por ser anónimos.

Expuso que como miembro del CNM y profesional del derecho es de suponer que el funcionario conocía el reglamento 1-17 para la aplicación de la ley  138-11 Orgánica del Consejo, así como sus 40 articulados, acompañados de sus respectivos párrafos, antes de guardarse sus argumentaciones para exponerlas en el pleno del organismo, “con el objetivo de difamar, reflejando con esto sus aviesas intenciones”.

Dijo que la presentación de documentación anónima por parte del procurador, sin el debido procedimiento y, en desmedro de la magistrada   Germán Brito, es violatoria al principio de congruencia, ya que los derechos de petición y  de defensa están  íntimamente vinculados.

“Es por ello que no deben ser admitidas por el CNM para su ponderación, dichas documentaciones, ya que las mismas no fueron sometidas al debate y sobre las cuales las partes no tuvieron posibilidad ni ocasión de defender sus respectivos puntos de vista en el momento y plazo establecidos.

Melenciano opinó que el procurador lo que buscaba era crear un “enorme daño a la honra” de la jueza  Germán Brito.

Señaló que es tendencia en el ordenamiento jurídico de que debería prohibir a las autoridades  iniciar cualquier actuación penal o disciplinaria con base en un anónimo. Primero, por la debilidad que muestra quien no da la cara y prefiere tirar la piedra desde la oscuridad, y segundo, por la desventaja en que se encuentra el incriminado, quien además de ser sorprendido está desarmado ante su detractor, y totalmente indefenso, en cuanto imposibilitado para controvertir las supuestas pruebas en su contra.

“Si el Procurador hubiere obrado en ejercicio de sus facultades, como tal, lo primero que debió hacer es realizar las  indagaciones preliminares sobre la conducta de la magistrada Miriam Germán, atendiendo a los términos del supuesto  “anónimo”,  y no crear dificultades mayores para un personaje público, reproduciendo en los medios de comunicación informaciones no investigadas,  causando con esto enorme daño a la honra y a su buen nombre”, sostiene el jurista y comunicador.

Expresó que “esparcida la especie y estimulado el morbo colectivo, aun la exoneración posterior o el archivo de las diligencias, o la preclusión, no son suficientes para restablecer la imagen pública de la afectada”.

Miguel Melenciano se basó en sentencias de las cortes supremas de Colombia y México, que asegura han sentado jurisprudencia internacional, para sostener que los “anónimos” del procurador Jean Alain Rodríguez contra la magistrada Miriam Germán Brito, los hace “irrecibibles” y a la vez “inamisibles”, después de hacerlos públicos y sin cumplir con las exigencia del reglamento que rige el CNM.

Redacción