RedacciónEl licenciado Ramón Ventura Camejo, miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), consideró que la modernización y la permanencia de esa organización como principal fuerza política, debe lograrse a través de la adopción de un plan estratégico, el cual alejaría cualquier problema de fragmentación en el porvenir.
El también ministro de Administración Pública señaló que ese plan estratégico también permitiría un mejor conocimiento del propio PLD, que a través de los diagnósticos que realiza, podría conocer cuáles son sus debilidades, sus fortalezas, sus oportunidades y sus amenazas.
«Nosotros insistimos en la idea de que en el PLD se dé un plan estratégico, por varias motivaciones, entre las cuales destaca el tema de la formación y la capacitación, que debe basarse en los objetivos que se desean alcanzar, y que el conocimiento adquirido sirva para dar respuestas efectivas a las demandas de la sociedad actual, y producir el tipo de militante que necesitamos” explicó Ventura Camejo.
Y agregó: «Esto es lo que llamamos análisis FODA, que permite que toda la organización pueda conocer qué somos hoy realmente, cuál es nuestra situación, y, en consecuencia, trabajar aquellos elementos que puedan ser una amenaza para la organización, al tiempo que facilitaría descubrir cuáles son las oportunidades que brinda el espacio social».
El dirigente político manifestó que otro elemento a tomar en cuenta, es que un plan estratégico también conduciría a la realización de un estudio para conocer el clima organizacional del partido, según lo informado por el periodista Luís Céspedes Peña.
«Evidentemente que también un plan estratégico tiende a identificarnos, porque si ejecutamos un procedimiento democrático en el que participe toda la dirección del partido, el Comité Político, el Comité Central, las circunscripciones, los Comités Provinciales, los Municipales y las Bases, y donde se escuche, además, a la ciudadanía, entonces vamos a hacer un ejercicio participativo donde se puedan expresar las ideas, las preocupaciones, las expectativas de todo el mundo, para que se escuchen todas las opiniones sobre qué somos y qué debemos ser», observó.
Otra consideración expresada por Ventura Camejo, es que uno de objetivos del plan estratégico es fortalecer la unidad, «porque el momento en que se plasma el plan y se definen las líneas estratégicas es con la participación de todos, y con el consenso de todos».
Ventura Camejo añadió: «Entonces todos nos sentimos comprometidos y todos nos sentimos reconocidos en las ideas y en la propuesta”.
“Y eso es fundamental para garantizar a una organización, en este caso un partido político, la permanencia y la continuidad, porque está sujeto a la dinámica social, con la emergencia de la participación de nuevos actores, como ha sucedido en España, con la aparición de partidos como Podemos y Ciudadanos», indicó.
Indicó que la adopción de un plan estratégico aportaría más racionalidad al partido, porque se conocerían mejor cuáles son sus retos y desafíos, además de sus oportunidades, lo que permitiría establecer prioridades, cómo el dónde invertir los recursos materiales.
Sobre el tema de la institucionalidad del partido, Ventura Camejo recordó que el profesor Juan Bosch siempre insistía en que la unidad de la entidad, durante su gestión, radicaba en la unidad de los métodos de trabajo y de propósitos.
«Al respecto, habría que tomar en cuenta dos enfoques claves: una con la tendencia del país y la región, que es la prospectiva, y otra de cómo el partido quiere posicionarse en ese entorno futuro que le espera. ¿Cómo el partido se visualiza en cinco años o diez?, se preguntó.
Dijo que hay que definir eso, y también cuál es nuestra identidad en un mundo, como el de hoy, de tanta confusión.
Precisó que los planes estratégicos buscan definir los resultados y el rumbo que quiere cualquier ente público o privado. Explicó que éste ayuda a comunicar, a dar coherencia, a mejorar la asignación de recursos y a visualizar qué hay en el panorama futuro.
Consideró que el plan estratégico debe tener un carácter participativo para dar espacio a todos los involucrados para que sea una herramienta lo más amplia y democrática posible para asegurar su éxito en el proceso de modernización del Partido de la Liberación Dominicana.
“Y lo que es más importante, fortalecería la unidad interna y evitaría cualquier fragmentación en el futuro”, concluyó Ventura Camejo.
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