RedacciónLas principales confederaciones sindicales del país anunciaron que el próximo jueves, a las 10:00 de la mañana, realizarán una marcha en el Distrito Nacional, en demanda del establecimiento de un sistema de seguridad social, público y solidario.
Rafael Abreu, de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS); Jacobo Ramos, presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD); y Gabriel del Rio, de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), expresaron en una declaración conjunta que el nuevo sistema de seguridad social debe garantizar a los trabajadores y a la población en general, un adecuado servicio de salud, protección frente a los riesgos laborales y pensiones justas y suficientes.
Los convocantes precisaron que la marcha iniciará frente a la Torre Empresarial, y que hará una parada en el Ministerio de Trabajo, y concluirá en las inmediaciones del Congreso Nacional.
Las confederaciones sindicales reiteraron que el tema de las comisiones a las AFP, no solucionan las graves injusticias y falencias del modelo de seguridad social vigente en el país, debido a que comprobado y evidenciado, que la adecuada solución es el establecimiento de un sistema de seguridad social, solidario y universal, que supere el actual modelo privatizador.
Señalaron que lo antes citado se resalta en un estudio realizado por la Fundación Juan Bosch, el cual establece que el 82.4 % de los trabajadores se jubilarían con 8 mil pesos o menos, esto tendrá un impacto terrible para los obreros por el bajo salario que los mismos devengan.
Por esta situación, señalaron que un estudio sobre las pensiones que realizó la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el 2018, plantea la reversión del Sistema de Capitalización Individual y la reconstrucción de los sistema públicos de pensiones, precisamente frente al fracaso de este modelo por no garantizarles pensiones adecuadas y suficientes a los trabajadores y a la población en general.
En este estudio realizado por la OIT, se resaltaron los siguientes hallazgos:
- El 60 % de los países que privatizaron las pensiones públicas obligatorias revirtieron dicha privatización, y teniendo en cuenta las sucesivas pruebas sobre las repercusiones sociales y económicas negativas, se puede afirmar que el experimento de privatización de las pensiones públicas ha fracasado.
- La privatización de las pensiones no dio los resultados esperados. Las tasas de cobertura se estancaron o disminuyeron, las prestaciones de las pensiones se deterioraron y la desigualdad de género y de ingresos se agravó, lo que despojo a la privatización de apoyo popular.
- El riesgo de las fluctuaciones en los mercados financieros se trasladó a las personas físicas.
En tal sentido, los gremios sindicales advirtieron al Gobierno, al Congreso Nacional y los empresarios que en el país puede desatarse grandes movilizaciones y huelgas como ha estado sucediendo en Chile.
Recordaron que dentro de la demanda se plantean la eliminación del actual modelo de pensiones de capitalización individual, pues se ha evidenciado que no garantiza pensiones justas y suficientes, sino grandes ganancias al sector financiero privado que lo administra a través de las AFPs.
A modo de conclusión, indicaron que el Gobierno y la comisión bicameral pretenden ignorar el proyecto de ley presentado por las confederaciones sindicales y asumido por cinco senadores, solicitaron al Congreso Nacional que se abstengan de aprobar una reforma tipo parche a la Ley de Seguridad Social.
Entiende que el proyecto actual en definitiva resultará más beneficiosa para las AFPs que el estado de situación que mantienen actualmente.
Los sindicalistas plantearon seguir el ejemplo de los senadores Adriano Sánchez Roa, José Hazim Frappier, Rubén Darío Cruz, Manuel Guichardo, y Luis René Canaán, quienes asumieron el proyecto de las confederaciones sindicales.
Destacaron que dicho proyecto plantea un sistema de reparto con certidumbre en el tipo de pensión a que tendrán derecho los trabajadores y que consistirá en que con 30 años de cotizaciones recibirán el 100 %, con 25 años de trabajo recibirán un 90 %, con 20 años un 80 %,: “Estos montos referidos al tipo de ingreso que el trabajador perciba por concepto de salario en su etapa activa en ningún caso así está consignado en el proyecto de referencia”.
