RedacciónBrandone Francis pasó sus primeros 17 años en la República Dominicana, donde fue asesorado por el entrenador Pedro Maldonado. Francis se mudó a Jacksonville, Florida, para su último año de escuela secundaria en Arlington Country Day. El escolta de 6 pies y 5 pies ganó el puesto No. 35 en el ranking nacional de reclutamiento de los Rivals y se dirigió a Florida imaginando un futuro de la NBA.
En cambio, promedió 2 puntos con un lamentable 20 por ciento de sus tiros. El entrenador que lo reclutó, Billy Donovan, se había ido a la NBA. Francis se dirigió a Lubbock, y se dio cuenta de que necesitaba aclarar su mente.
«Estaba enojado por ver a todos mis amigos en la NBA. Al salir de la escuela secundaria, tenía grandes planes para mí. … Las cosas no funcionaron como yo quería «, dijo Francis.
“Dejé de compararme con ellos. Me concentré en mí, me miré en el espejo y encontré una manera de decir: «¿Cómo voy a llegar allí? ¿Qué debo hacer para ser mejor?»
Francis volvió a emerger como el sexto hombre en un equipo de Red Raiders lo suficientemente bueno como para alcanzar el Elite 8 hace un año. Promedió 5.1 puntos. En su temporada senior, tiene 6.1 puntos por juego y es el cuarto del equipo con 40 canastas de 3 puntos.
Francis siente el peso de representar a su natal República Dominicana en esta etapa. Él sabe que muchos en esa nación amante del béisbol lo están observando.
«Cada publicación (en las redes sociales) que hago, se trata de la Dominicana», dijo. «Viví toda mi vida allí. Eso es lo que soy. Eso es lo que represento cada día».
Él jugará en el equipo nacional dominicano en la Copa del Mundo en China este verano. Entonces Francis planea comenzar a retribuir a su comunidad de La Romana.
Es donde Maldonado aún se esfuerza, enseñando a niños como Francis.
«Voy a tratar de hacer cosas por los demás y ser agradecido, hombre. Eso como que despertó a todos, a disfrutar cada momento, a disfrutar a tus seres queridos «, dijo Francis.
