El presidente de la Suprema Corte de Justicia y del Consejo del Poder Judicial, magistrado Luis Henry Molina Peña, exhortó este miércoles a abogados y otros actores a preservar la legitimidad de la justicia y abstenerse de utilizar en su ejercicio profesional mecanismos que beneficien a sus clientes a costa de afectar todo el sistema.
Al presidir la audiencia de juramentación de 276 abogados y abogadas, el magistrado Molina Peña consideró de gran importancia cuidar la legitimidad de la justicia y el rol que desempeñan los jueces y las juezas.
“Que al hablar de su ejercicio se diga que el estudio y buena práctica del Derecho les consagra a ejercer su profesión con respeto al oficio”, recomendó al grupo que en lo adelante queda autorizado a desarrollar el ejercicio en los tribunales del país.
El presidente de la alta corte resaltó la necesidad de que en los juicios se observen, de manera permanente, todos los elementos procesales con respeto a todas las prerrogativas y que cada parte cumpla su rol para que de esa forma estén cubiertos los elementos necesarios para que la Justicia pueda desempeñar su tarea.
“Lo que permite que el honor de abogado sea merecido es que vayamos a los tribunales a buscar la justicia como bien mayor, a pedir que la aplicación de la ley sea equitativa, que se respete el debido proceso. A exigir que se reconozca la dignidad de sus clientes sin afectar la de su contraparte, a ser tratados con igualdad ante la ley”, dijo en la juramentación, dedicada al jurista Raymundo Amaro Guzmán.
El magistrado Molina Peña aseguró que la función judicial tiene retos y debe encontrar en la comunidad jurídica aliados para lograr un servicio oportuno y eficiente, íntegro y transparente, con calidad y garantía de acceso a todas las personas, por lo que reiteró su llamado a los jueces y juezas a que no les tiemble el pulso ante el ejercicio temerario y prácticas dilatorias.
“Los jueces y juezas se deben al Derecho, a la relación de reglas, procedimientos y valores que lo componen. Es esa relación de jerarquías la que sostiene la unión social. Comprenderla, entender el peso de eso en la sociedad, nos obliga a ejercerla con mayor cuidado de las formas y del fondo”, afirmó Molina Peña.
El juez presidente de la SCJ insistió en la importancia de promover la idea de la justicia, cuyos aportes serán mejor valorados en la medida en que la sociedad se familiarice con lo jurídico y comprenda el rol de los jueces.
Padre de la administración pública dominicana
Durante la audiencia se destacó la trayectoria de Raymundo Amaro Guzmán, uno de los más grandes maestros del Derecho en el país y considerado “padre de la administración pública dominicana”.
El doctor Amaro Guzmán inició su labor como servidor público cuando tenía 25 años y fue designado juez de Paz para los municipios Moca y Puerto Plata y en el Distrito Judicial de Santiago, donde también fue juez de la Cámara Civil y Comercial.
Fue un investigador y maestro del Derecho administrativo, estudió buena parte de las mejoras a la arquitectura de la administración y la función pública dominicana.
El destacado jurista (1934-2018) dejó un legado de honestidad, con décadas de entrega al servicio público y una amplia bibliografía que sirve como referente en la materia.