RedacciónLAS VEGAS. La reaparición de Manny Pacquiao en los escenarios agrandó más su fortuna, pero fue un fracaso para los organizadores, que basan las ganancias en las ventas de pago por ver (PPV).
La Pacquiao-Bradley III, celebrada el 9 de abril en el MGM Grand de Las Vegas, generó entre 400,000 y 500,000 compras de PPV en la cadena HBO, un resultado muy decepcionante, dijo el miércoles el promotor de Top Rank, Bob Arum.
Pacquiao derrotó a Timothy Bradley Jr., por decisión unánime. El estadounidense se llevó el triunfo en la primera pelea en 2012 y Pacquiao en 2014.
“Va a estar en algún lugar entre los 400,000 y 500,000. Todavía están sumando pero va a estar más cerca de 400,000 a 500,000. Terrible”, dijo Arum. Algunos en la industria creen que Arum es optimista y que cuando todo se cuente la pelea podría incluso no llegar a 400,000.
De cualquier manera, Arum dijo que la cartelera, cuyo evento principal por sí solo costó $24 millones ($20 millones para Pacquiao y US$4 millones a Bradley), perdió dinero.
“Sí, se pierde dinero”, dijo Arum. “No fue uno de nuestros grandes éxitos. Sucede. Somos personas ya grandes. ¿Me siento bien por ello? No”.
Arum dijo que los pobres resultados no obedecen a que el público está cansado de las peleas de Pacman con Bradley, sino una combinación de la reacción abrumadoramente negativa del público a los recientes comentarios anti-gay de Pacquiao en la que dijo que los homosexuales son “peores que los animales” y debido a una resaca de la mega pelea en mayo pasado de Floyd Mayweather-Pacquiao, que costó US$100 y entregó tan poco que muchos aficionados siguen molesto por eso.
“Ciertamente, el efecto de las declaraciones de Manny hacia los homosexuales nos mató”, dijo Arum. “Nos duele mucho. Pero creo que también fue menos una reacción al enfrentamiento que la reacción a la pelea Mayweather-Pacquiao. Fue una reacción como la que Mayweather consiguió. Mayweather también fue castigado (por los consumidores)”.
Cuando Mayweather derrotó a Andre Berto en septiembre en su pelea de retiro, la primera desde la pelea de Pacquiao, no tuvo mucho éxito, al generar alrededor de 400,000 compras en Showtime PPV.
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