Oscuro panorama para Kobe Bryant en la NBA

Por Gonzalo Aguirregomezcorta

LOS ÁNGELES — Otra lesión, otro infortunio tan súbito como la rotura en el tendón de Aquiles que Kobe Bryant sufrió en abril de 2013 o la fractura que se produjo en la rodilla izquierda en diciembre del mismo año. Y ya van tres contratiempos en menos de dos años. En este caso, podríamos estar hablando de un periodo de cuatro a más de seis meses, es decir, Kobe diría adiós a la temporada. Sin embargo, este nuevo desliz no tendría por qué significar su retirada. Pero vayamos por partes y entendamos el problema al que se enfrenta.

El escolta de Los Angeles Lakers sufre un desgarre en el manguito rotador del hombro derecho. Así lo confirmó la franquicia este jueves después de que el jugador se sometiera a una resonancia magnética en San Antonio, donde su equipo se medirá a los Spurs el viernes. Tras los resultados, Kobe regresó a casa y no sólo está descartado para el encuentro ante los Spurs, sino que las posibilidades de que se pierda la temporada son muy grandes. Enormes.

El manguito rotador es un tendón que sirve de terminación de tres músculos que ayudan a rotar el hombro. Suele tener de cinco a siete milímetros de ancho, dependiendo de la edad, y cuenta con una superficie inferior y otra superior. Aún se desconoce el alcance del desgarro, sin embargo, en una conversación con Eduardo Amy, médico del Comité Olímpico de Puerto Rico, ESPNDeportes valoró las opciones a las que se puede enfrentar Kobe.

TIPOS DE DESGARRE

Hay varios tipos de desgarre del manguito rotador. Por un lado están los parciales, donde no haría falta una intervención quirúrgica y sería suficiente con un tratamiento de descanso y rehabilitación. En este caso, Kobe estaría de vuelta en pocas semanas (de manera limitada y utilizando en los momentos donde sea estrictamente necesario). Esta opción parece la menos probable, tal y como explicaremos a continuación.

Por otro lado, un desgarre más significativo sería el que cubre esos cinco a siete milímetros. En ese caso, estaríamos hablando de que Kobe debería pasar por quirófano. Otra posibilidad en la que tendría que ser intervenido quirúrgicamente es si el manguito rotador se desprende del hueso. En ambos casos, Kobe quedaría descartado para lo que resta de temporada.

Hay un hecho específico que indica que la lesión de Kobe es significativa, y que el desgarre podría ser más severo de lo que él mismo pensó tras el partido ante los Pelicans de Nueva Orleans de este miércoles. La Mamba Negra se dañó al convertir una clavada. Sintió dolor en su hombro derecho. Se retiró a la banca y se trató con hielo. Poco después regresó a la duela para comprobar cómo se sentía y acabó utilizando su brazo derecho para lanzar a canasta. Byron Scott le volvió a retirar de la duela y el jugador se marchó al túnel de vestuario antes de que finalizara la cita.

Cuando Gary Vitti comprobó que Kobe no podía utilizar el brazo dominante, se debió temer lo peor.

«Si salió a jugar con la izquierda y no usó la derecha (brazo dominante de Kobe), me dice que el desgarre debe ser significativo», especuló el Dr Amy (especialista médico en todas las modalidades deportivas del Comité Olímpico de Puerto Rico). «Siempre es un signo malo cuando alguien tiene una lesión y en caliente no puede jugar, porque el dolor comienza cuando viene la hinchazón -es decir, en frío-. Kobe inmediatamente no lo pudo usar, eso me sugiere que perdió continuidad. Eso podría significar que se ha separado del hueso. Si los deportistas no siguen al estar en caliente no es porque tengan dolor, es porque no tiene función. La estructura anatómica no tiene continuidad», afirmó.

PLAZOS DE LA OPERACIÓN

Si finalmente se confirman los peores augurios, Kobe debería someterse a una artroscopía (operación sin necesidad de abrir y en la que se utiliza una pequeña cámara para examinar o reparar los tejidos). Estaría inmovilizado con cabestrillo por un periodo de cuatro a seis semanas. Según indica el Dr Amy, sus movimientos serían pasivos, es decir sin usar los músculos. Tras ese periodo, comenzaría a recuperar el movimiento por medio de ejercicios. Esta fase duraría de dos a cuatro semanas. A continuación comenzaría la fase de fortalecimiento de los músculos, es decir, a partir de tercer o cuarto mes debería dedicarse a fortalecer el hombro y los músculos de alrededor.

Kobe no volvería a entrar en contacto con el esférico hasta el sexto mes. Sería entonces cuando practicara con un terapeuta los movimientos que se suelen hacer en la cancha. Cuando domine esta fase, podría volver a practicar junto a sus compañeros, por lo que estaríamos hablando de que la Mamba Negra podría no volver a las duelas hasta el mes de agosto aproximadamente entre recuperación del hombro y acondicionamiento

Si se confirma los peores augurios, Kobe podría estar fuera por alrededor de 6 meses.