RedacciónEn poco menos de dos horas, Danilo Díaz convenció al ejecutivo del Comité Olímpico Dominicano y las federaciones de reactivar la armonía de unas relaciones con casi un cuatrienio rotas con el Ministerio de Deportes, y logró este primer paso sin prometerles que pedirá más dinero para el Presupuesto Nacional 2017, ni que les aumentará las subvenciones mensuales, la sangre que mueve el olimpismo.
El nuevo ministro y Luisín Mejía acordaron dar forma en los próximos cuatro meses a un plan para el desarrollo del deporte que busca integrar en un mismo objetivo agentes como el Ministerio de Educación (MINERD), INEFI, Educación Superior (MESCYT), los ayuntamientos, Círculo Deportivo Militar y Policía Nacional, CRESO y el empresariado. Habrá una agenda de trabajo en la que cada federación deberá explicar el próximo mes sus objetivos antes de presentar el gran proyecto.
“El plan no lo quiere imponer el Ministerio (de Deportes) sino que lo quiere construir junto con las distintas instituciones y sectores que participan en el mismo, porque no venimos con la varita mágica, es un asunto de consenso y, obviamente, en base a principios y procedimiento. Estamos hablando de que en todo tiene que haber una planificación conjunta, un seguimiento y una obtención de resultados”, dijo Díaz en su despacho.
Las diferencias de criterios entre Deportes y el COD, que se tradujo en una doble agenda de trabajo, provocaron un divorcio entre ambas unidades que, entre otras cosas, tuvo como resultado un ciclo (2012-2016) en el que el país descendió en la cosecha de medallas desde los Juegos Centroamericanos y del Caribe hasta los Olímpicos, si las cosechas pueden servir como parámetro.
“Abrazarnos en una misma idea. La sociedad esperaba mucho de nosotros. El ministro hizo gala de lo que es el poder de la concertación”, dijo Mejía. “Tenemos una cuota importante (de responsabilidad), pero no es la única, y nosotros abrazamos esa cuota”.
Díaz, exasistente del presidente Danilo Medina, insistió en la necesidad de crear políticas comunes para evitar las distracciones y ruidos que alejen potenciales inversiones, que consideró serán claves para cuadrar el flujo de caja que requerirá el nuevo plan.
“Uno de los elementos del pacto es poder lograr que la inversión pública que hace el Estado como la privada que se hace a través de muchos mecanismos, podamos direccionar esos recursos en una única y una misma dirección, y no tenemos duda de que si logramos eso, los resultados serán diferentes de los que tenemos a la fecha”, explicó Díaz. Pero, a pesar de no garantizar tener una chequera abierta, aseguró que no se faltará a un compromiso por falta de recursos.
El ministro puso el ejemplo del programa Creando Sueños Olímpicos (una iniciativa privada que patrocina atletas) como la punta del iceberg de lo que se podría obtener si se crea una plataforma atractiva para sumar energía y recursos de personas y empresas interesadas en vincularse con el deporte.
Sus palabras sobre la inversión del Gobierno llegan el mismo día en que DL revela que la Dirección General de Presupuesto envió una circular en la que informa sobre el tope del gastos que debe aplicarse para la formulación de anteproyectos para 2017.
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