SEÚL.- E llíder de Corea del Norte, Kim Jong-un, reapareció ante las cámaras el sábado pasado tras haberse alejado del público durante un mes. Pero algo llamó la atención en la imagen del dictador y generó especulaciones sobre su estado de salud: los expertos sugieren que perdió peso.
Por ser el líder de una de las naciones más herméticas del mundo con poderío nuclear, Kim es centro de constantes monitoreos internacionales.
Su salud es vigilada de cerca por las agencias de inteligencia extrajeras y despertó particular interés en el Servicio de Inteligencia de Corea del Sur (NIS), informó NK news.
Coincidió la agencia de noticias Yonhap de Corea del Sur, que sugirió que la figura de Kim estaba notablemente más esbelta en las imágenes publicadas.
La razón de la pérdida de peso del joven es incierta. Un analista dijo a NK News que podría ser “una simple cuestión de un cambio de estilo de vida saludable o un tema más complejo”.
Si Kim perdió peso intencionalmente, entonces “probablemente mejorará su posición en casa”, señaló al medio. Sin embargo, si se debe a una enfermedad, entonces el gobierno norcoreano debe estar previendo “su sucesión entre bastidores”.
Kim, que se cree que tiene alrededor de 37 años, se ha tomado largos descansos fuera las cámaras. El año pasado, se ausentó durante tres semanas por razones que permanecen en un misterio aún sin resolver que gira en torno a especulaciones de un cuadro grave de salud. Algunos informes advertían que había muerto.
El líder coreano Kim Jong Un pronuncia un discurso antes de un desfile militar en la plaza Kim Il Sung en Pyongyang el 10 de octubre de 2020.
El sitio surcoreano Daily NK informó en aquel entonces que Kim tuvo que ser operado del corazón en abril debido a “su obesidad, su pronunciado tabaquismo y un exceso de trabajo”.
Kim tiene antecedentes cardíacos en su familia. Su padre, Kim Jong-il, murió de un presunto ataque cardíaco en diciembre de 2011.
Agregar comentario