RedacciónHan pasado dos años desde el accidente que se cobró la vida del actor Paul Walker, pero su hija Meadow no ceja en el empeño de aclarar cómo murió su padre. De hecho, la joven ha empezado la semana presentado una demanda por homicidio por imprudencia contra Porsche en Los Angeles.
Meadow alega que el modelo en cuestión, un Porsche Carrera GT tenía una «historia de inestabilidad y problemas de control», y destaca que los cinturones de seguridad están diseñados para empujar hacia atrás un cuerpo en caso de accidente. «Las costillas y la pelvis de Walker se rompieron, mantinéndole atrapado en el asiento del pasajero, en el que permaneció vivo hasta que le vehículo explotó un minuto y veinte segundos más tarde», señala la demanda.
Paul Walker era mundialmente conocido por su papel en la saga ‘Fast & Furious’, y en el momento del accidente viajaba junto a su amigo Roger Rodas, también aficionado a las carreras. Rodas perdió el control del coche, que slaió despedido hacia unos árboles cercados y un poste telefónico. Desde el primer momento, tanto el departamento del Sheriff de Los Ángeles como la Patrulla de Carretera de California aseguraron que la causa del choque fue la gran velocidad que llevaba el coche. De hecho, la viuda de Rodas interpuso ya una demanda contra Porsche el pasado mes de abril, ante la que la compañía aseguró que la culpa era del conductor.
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