Sundar Pichai, líder de Google.

El hombre fuerte de Google que prefiere pasar desapercibido

Microsoft es Bill Gates, Facebook es Mark Zuckerberg y Apple es Tim Cook (desde que dejó de ser Steve Jobs). Estas personas tienen un perfil no solo muy conocido, sino que además es difícil disociar la marca de la persona. Utilizamos sus productos todos los días y, además de ser los CEOs de sus respectivas empresas, son muy conocidos tanto por su trabajo como por su vida personal. Han conseguido atraer la atención del público de forma masiva, quizás porque utilizamos sus productos de forma diaria. O al menos lo hicimos en el pasado.

Otros son conocidos quizás a pesar de sus productos. No hace falta usar ChatGPT para haber oído hablar de Sam Altman ni tener un Tesla para saber en qué anda Elon Musk. Son casos en los que la persona ha sobrepasado ampliamente la marca, haciendo que la persona sea la marca. Se representan a sí mismos, más que a sus respectivas empresas o invenciones, de tenerlas, haciendo que su interés radica en lo que dicen y lo que hacen, más en lo que producen. Sus empresas caen en un segundo plano: importan más ellos, las personas, por lo que son.

También existen personas de quienes usamos sus productos de diario de los que no sabemos nada. CEOs que, hasta cuando ocupan titulares, se las apañan para mantenerse entre las sombras. Porque, ¿cuánta gente conoce el nombre del CEO de Google? Mucha menos que cualquiera de los que hemos nombrado hasta ahora. Pero su nombre es Sundar Pichai. Y su ideología ha teñido, para bien y para mal, los últimos quince años de Google.

Sundar Pichai nació en Madurai, la India, el 10 de junio de 1972. Pero lejos de ser una historia de superación ante la adversidad, estamos ante un caso, una vez más, de una persona bien posicionada desde su nacimiento. De madre estenógrafa y padre ingeniero en el mayor conglomerado eléctrico británico, el GEC, Pichai nació en una familia acomodada. Esto le permitió tener una educación más que respetable, graduándose en Stanford en ingeniería y ciencias materiales y obteniendo un MBA por la Wharton School de la universidad de Pennsylvania.

Tras graduarse no empezó a trabajar inmediatamente en Google. Primero trabajó en ingeniería y gestión de productos en Materiales Aplicados y, posteriormente, en consultoría de gestión en la consultora McKinsey & Company. Y es interesante pararse aquí un momento, porque 17 CEO de Fortune 500 han trabajado antes en McKinsey. ¿Por qué?

Obviamente, no se trata de que en McKinsey solo contraten a los mejores o que tengan unas cualidades especiales que no tienen los empleados en otras empresas. Es porque McKinsey & Company es una multinacional dedicada a la consultoría de gestión, ofreciendo servicios profesionales a corporaciones, gobiernos y otras organizaciones. Quienes trabajan en McKinsey tienden a hacer contactos que les permiten conseguir muy buenos trabajos tras pasar por la firma, haciendo que tengan una buena agenda con la que seguir ascendiendo en futuras empresas.

Ese fue el caso de Pichai. Y es algo de lo que él es consciente. Ha dicho en varias ocasiones que “estar rodeado de gente más capaz que tú es una de las mejores formas de evolucionar”, demostrando la consciencia que tienen los demás sobre su carrera. Y lo demostró tras pasar por McKinsey & Company durante un periodo inconcreto, hasta que se unió a Google en 2004.

El Motín