RedacciónEl receptor estelar de los Gigantes de San Francisco, Buster Posey, no ha podido superar los problemas físicos que le afectan a la cadera derecha y los médicos del equipo ya le han informado de que tendrá que pasar por el quirófano.
El técnico de los Gigantes, Bruce Bochy, dijo al «San Francisco Chronicle» que con la operación los doctores podrían repararle el cartílago labrum de la cadera, que tiene desgarrado, y también eliminar unos pequeños espolones óseos.
Por su parte, el gerente general de los Gigantes, Bobby Evans, también reconoció que todas las opciones habían sido discutidas con Posey, y entre ellas la posibilidad de la intervención quirúrgica, que le costaría perderse lo que resta de temporada.
Su baja, con los Gigantes sin opciones a estar en los playoffs, no sería un grave problema deportivo para el equipo de San Francisco.
Posey, de 31 años, ha tenido que jugar durante toda la temporada con las molestias en la cadera derecha, lo que ha limitado de manera considerable su rendimiento en el diamante.
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