RedacciónEl Primer Juzgado de Instrucción del Distrito Judicial de San Francisco de Macorís aplazó este lunes hasta el jueves 22 del presente mes, el conocimiento de anticipo de pruebas en el caso del asesinato de la adolescente Emely Peguero, embarazada de cinco meses en el momento de su muerte.
La decisión de la jueza Isolina Contreras Peralta estuvo motivada por la ausencia en la vista del abogado de Marlon Martínez, principal imputado en el caso, quien guarda prisión preventiva, al igual que su madre, Marlin Martínez, acusada de orquestar la desaparición del cadáver.
La audiencia se aplazó «para que estuviese garantizada su derecho a la defensa técnica del imputado que en este sentido la representa el abogado», explicó ante los medios el fiscal de la provincia Duarte, Regis Victorio.
El anticipo de pruebas se fundamenta en razones de necesidad y urgencia para evitar que se esfumen aquellos medios e informaciones que importan para el conocimiento del juez ante la imposibilidad o dificultad de incorporar las pruebas en el juicio oral y público correspondiente.
El Ministerio Público solicitó este anticipo de pruebas después de que Simón Bolívar Ureña (alias El Boli), acusado de ocultar el cadáver de Peguero, manifestase su inquietud por varias visitas que, supuestamente, recibió por parte de Cándido Simón, abogado de Marlin Martínez, mientras estuvo confinado en el Centro Correccional Vista al Valle.
Estas visitas, cuatro en total, se habrían producido antes de la jueza del caso extinguiera la semana pasada la acción penal contra Bolívar Ureña, en virtud de un acuerdo suscrito entre el imputado y el Ministerio Público.
Sin embargo, el representante legal de Martínez niega categóricamente ese supuesto, y afirmó ante los medios de comunicación que solo visitó en su celda a Bolivar Ureña en una ocasión, el 3 de octubre de 2017, a petición del imputado y estando presente su abogado.
Cándido Simón afirmó que el resto de visitas no son ciertas ni constan en el libro de registro del penal, y calificó de «gravísimo» el hecho, porque supone «una alteración terrible» que le facultaría para interponer una querella «por falsificación de documento público».
A su entender, las manifestaciones de El Boli señalando que se sentía amenazado por esas supuestas visitas constituyen «una estratagema para inducir al fiscal a error», ya que estas nunca se produjeron.
De acuerdo con las autoridades, Emely Peguero murió a causa de hemorragia por aborto inducido y un fuerte golpe en la cabeza, que se lo habría ocasionado su novio Marlon Martínez, quien guarda prisión preventiva al igual que su madre, Marlin Martínez, acusada de orquestar la desaparición del cadáver.
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