RedacciónAnte la advertencia hecha por el alcalde Abel Martínez, para que la población se abstuviera de comprar en el Hospedaje Yaque, debido a la negativa de los vendedores de la plaza de acatar las normas de higiene, las autoridades municipales procedieron al cierre de dicho mercado, como parte de las medidas preventivas por la presencia del coronavirus, COVID-19.
En el Hospedaje Yaque, los vendedores de frutas, vegetales, víveres y legumbres, no cuentan con las más mínimas condiciones que garanticen la salud de la población y colocan los productos encima del pavimento cubierto de lodo y sin ningún tipo de control.
Pese a que las brigadas municipales acuden a realizar sus labores de limpieza diariamente por todo el entorno, el manejo irregular de los productos por parte de los vendedores y suplidores que acuden desde diferentes comunidades de la región, no contribuyen con la limpieza, ni observan las más mínimas normas de higiene, lanzando los desechos en plena calle.
Mientras las brigadas, auxiliadas por miembros de la Policía Nacional y municipal, proceden a desmantelar los tarantines y otros escaparates colocados de manera irregular, aparecen acumulaciones de elementos contaminantes, aunque los vendedores manifiestan su oposición a salir del lugar, pero las autoridades municipales, solo buscan garantizar la salud de la población, amenazada hoy más que nunca con la presencia en el país del coronavirus.
El alcalde Abel Martínez reiteró que la salud de la población está por encima de cualquier interés particular o comercial, y aseguró que el mayor interés es que los vendedores asuman su rol y sean parte de la organización y la higiene que debe tener un mercado donde se venden productos comestibles.
