El Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor), se pronunció ante la denuncia de ventas de tuberías de mala calidad en el país, sosteniendo que si algunas de las que se encuentran en el mercado no cumplen con los requisitos técnicos y la calidad establecida, procede retirarlos porque dichos requisitos indican los criterios estandarizados que se deben cumplir en los procesos productivos para fabricar bienes adecuados.
Anina Del Castillo, titular de la entidad, expresó que en el país está vigente el Reglamento Técnico RT-008 del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones que regula las instalaciones sanitarias del país, en el cual son indicados los requisitos que deben cumplir las tuberías de las instalaciones hidrosanitarias en edificaciones y que además existen normas dictadas por el Instituto Dominicano de la Calidad (INDOCAL), sobre las tuberías plásticas y también pueden homologarse normas internacionales cuando se encuentren adecuadas a la realidad nacional.
“Estas normas establecen los criterios para la clasificación de los materiales, requisitos y métodos de ensayo para los mismos, acabados, dimensiones, presión sostenida, presión de ruptura, aplastamiento y calidad de extrusión y dimensiones para tuberías, entre otros criterios que son los que deben ser verificados y si no son cumplidos, procederemos a retirarlos”, dijo la funcionaria.
Indicó que, la utilización de materia prima inadecuada en la fabricación de tubos puede implicar que los mismos no cumplan con la resistencia necesaria que deben tener, ocasionándoles deformaciones, grietas, fugas y eventuales rupturas que, a su vez, pueden generar una serie de problemas en la edificación, tales como: desguace de revestimiento, moho, infiltraciones y humedad en el ambiente, generando problemas que incluso pueden perjudicar la salud de quienes viven en el lugar.
Del Castillo dijo que hay casos extremos en que la presencia de humedad podría comprometer la estructura de la edificación poniendo en riesgo la seguridad del usuario y la perdida de la inversión realizada.
Reveló que Pro Consumidor ha recibido 355 reclamaciones inmobiliarias, en las cuales el tema de las filtraciones es recurrente y esto podría estar relacionado al uso de tuberías de baja calidad y en estos casos se ha procedido a aplicar sanciones contra las constructoras.
Expresó que ante el crecimiento de la construcción en el país, Pro Consumidor coordinó y participa activamente en una mesa de trabajo con la Asociación Dominicana de Constructores y Promotores de Viviendas (ACOPROVI), con el objetivo de impulsar las mejores prácticas en el sector, elaborando de manera conjunta un Manual de las obligaciones de los promotores de viviendas, que incluye el uso de tubería adecuada.
“El trabajo es de varias instituciones del sector público y se necesita contar con el apoyo del sector privado y la sociedad civil, ya que la población consumidora tiene el derecho de recibir bienes y servicios adecuados, que cumplan con las especificaciones técnicas y, en caso de que no sea así, el consumidor tiene derecho a ser compensado.