RedacciónKim Kardashian muestra su lado más humanitario. La celebrity es una convencida luchadora por los derechos de los presos y, en especial, se posiciona radicalmente en contra de la pena capital.
Por eso ha visitado al condenado a muerte, Kevin Cooper, en la prisión de San Quintín, en California. Kevin Cooper, fue condenado por cuatro asesinatos cometidos en el área de Chino Hills en 1983.
«He tenido un emocional encuentro con Kevin Cooper en el corredor de la muerte de San Quintín. He visto que es considerado y honesto y pienso que es inocente», escribía la influencer en sus redes sociales.
En otra publicación en su cuenta de Instagram, la californiana se muestra optimista de que los resultados de ADN prueben, por fin, la inocencia de Cooper, de 63 años. Y agradece, además, al nuevo gobernador de California, Gavin Newsom, su voluntad de eliminar la pena de muerte en el Estado.
Aunque no es ninguna sorpresa el lado activista de la empresaria, que junto a su equipo legal ha conseguido liberar a 17 presos en los últimos tres meses, lo cierto es que ella no había hecho público hasta hace bien poco su personal batalla por ayudar a conseguir un sistema penitenciario más justo.
